Salud mental en positivo: consejos prácticos para aprender a soltar
Sentirte abrumado no es debilidad. Reconocer límites y soltar responsabilidades innecesarias es clave para recuperar tu bienestar emocional y mental.
Por
Betty Carranza
Publicado el 01 de septiembre de 2025
Sentirse abrumado no es debilidad, sino una señal de que necesitamos detenernos y cuidar nuestra salud emocional. La autoexigencia constante puede generar ansiedad, insomnio y agotamiento. Aprender a soltar, delegar tareas y establecer límites es crucial para mantener el bienestar mental. Reconocer que descansar es necesario para la recuperación del cuerpo y la mente, y pedir ayuda no significa rendirse. La psicóloga Kathya Trejo Ramírez destaca que en una cultura que valora el hacer constante, es esencial cuestionar frases dañinas y aprender a cuidar de nosotros mismos. El autocuidado incluye poner límites y disfrutar del descanso.
En El Salvador y en muchas culturas, se nos ha enseñado a vivir con prisa y autoexigencia, aceptando cargas que no siempre nos corresponden. Este ritmo constante puede causar ansiedad, insomnio, agotamiento físico y emocional. Reconocer que no podés con todo y aprender a soltar es esencial para tu bienestar emocional y salud mental. Pedir ayuda no significa rendirse, sino dar un paso necesario hacia una vida más equilibrada y consciente.
¿Cómo saber si estás exigiéndote más de lo que podés?
La autoexigencia crónica se manifiesta tanto en el cuerpo como en la mente. Algunas señales de alerta incluyen:
- Irritabilidad y ansiedad constante
- Problemas de memoria o concentración
- Tensión muscular, molestias digestivas o insomnio
- Sensación de vacío o pérdida del disfrute
- Culpabilidad al descansar o al decir “no”

La psicóloga salvadoreña Kathya Trejo Ramírez explica que esta presión muchas veces viene de mandatos culturales: “Se nos enseñó que valemos por lo que tenemos o hacemos. Que el 10 en el examen importa más que el esfuerzo. Que descansar es sinónimo de pereza. Incluso en redes sociales pareciera que siempre hay que estar haciendo algo”.
¿Cómo empezar a soltar sin sentir culpa?
Soltar no es abandonar, es reconocer que tu salud emocional importa. Estos pequeños pasos pueden ayudarte a comenzar:
- Hacé una lista realista de lo que podés delegar o dejar ir.
- Establecé prioridades: no todo es urgente ni igual de importante.
- Practicá respiración consciente o meditación guiada.
- Escribí lo que necesitás soltar y luego quemá o rompé ese papel como ritual.
- Buscá actividades que te conecten con el disfrute, no con el deber.
- Apoyate en personas de confianza, compartir también aligera.
Hablamos con una psicóloga salvadoreña Kathya Trejo sobre cómo empezar a soltar la autoexigencia y priorizarte sin culpa.
Y, sobre todo, cuestioná esas frases que te hacen daño: “Si descanso, pierdo el tiempo”, “si no hago todo, soy flojo”, “si no logro algo, no valgo”. No son verdades, son cargas heredadas que no necesitás seguir llevando.
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“Un día a la vez, un problema a la vez… está bien parar y descansar, está bien si no sabés cómo, está bien si te cuesta, solo intentalo, respirá y pará. Tu cuerpo te lo agradecerá", afirma Kathya Trejo Ramírez, psicóloga.
Parar también es avanzar: el descanso como parte del autocuidado
Descansar no es un lujo. Es una necesidad biológica. Durante el descanso, el sistema nervioso se regula, los niveles de cortisol (la hormona del estrés) bajan y el cuerpo se recupera. Como dice la experta: “Una persona que no descansa, no es persona”.
Aprender a poner límites es parte del proceso. Decir “no” también es decirte “sí” a vos mismo. Puede incomodar al principio, pero con práctica se vuelve más fácil. Poner límites no es egoísta: es una forma de proteger tu salud mental.
Mitos y realidades sobre la fortaleza emocional
“Ser fuerte es no mostrar emociones.”
Reconocer lo que sentís es una forma valiente de autocuidado.
“Pedir ayuda es señal de debilidad.”
Pedir apoyo muestra que sabés cuándo necesitás sostén.
“Siempre hay que dar el 100%.”
A veces dar un 40% es tu 100% y eso también vale.
“Si descansás, sos flojo.”
Descansar es cuidar tu energía y tu mente. No es perder el tiempo.
“La gente fuerte no se quiebra.”
Todos nos quebramos. La fortaleza está en reconstruirse.
¿Y si no tenés acceso a terapia?
Cuidarte también puede ser accesible y cotidiano. Algunas acciones que podés comenzar desde casa:

- Hacer respiraciones guiadas (hay opciones gratuitas en YouTube o apps)
- Escribir un diario para procesar emociones
- Salir a caminar con atención plena
- Mejorar tus hábitos de sueño
- Comer más balanceado y con consciencia

Recordá:
“Si hasta un celular necesita cargarse para rendir, ¿por qué vos tendrías que poder con todo?” Está bien parar. Está bien no estar bien. Y está bien empezar a cuidarte.
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