Las pensiones y un futuro sombrío

En el profundo cambio que se dio cuando una gran parte de la población se vio obligada a afiliarse a cualquiera de las cinco AFP que en ese momento eran las responsables  de llevar el buen manejo de las cotizaciones de los trabajadores.

Décadas han pasado y poco a poco se liquidó de 5 a 2 administradoras de pensiones que se fusionaron y ha sido la población que poco a poco va cumpliendo el tiempo establecido para su retiro quienes están sufriendo en carne propia la baja pensión que jamás creyeron recibir.

Es preocupante que aun, los grupos más afectados son los que en este momento tienen de 55 años a 65 años pues todo lo que un día se planeó, se quedará simplemente en un plan: creer que se tendría una vejez sin preocupaciones era el sueño de este grupo poblacional.

Sin embargo será este descalabro económico el que asestará el tiro de gracia a un país cada día más pobre. Aun, muchísimos no han entendido y culpan a las anteriores gestiones presidenciales como a la actual cuando debe el sentido común prevalecer.

Ejemplo claro: Si yo cotizo doscientos dólares mensuales, ¿cómo puedo esperar recibir una pensión que supere los mil dólares?

Somos un país pobre y es un imposible elevar la tasa de cotización y por ende, las pensiones a recibir son y serán bajas, totalmente incompatibles con la calidad de vida de cualquier persona.

Sin embargo, el grupo más afectado a corto plazo parece que no se da cuenta de que todo el dinero ahorrado durante la vida laboral, que según cálculos de cada uno de los cotizantes sería una pensión dignísima, no será ni por cerca nada de lo que se esperaba.

Qué decir de los jóvenes que empiezan a cotizar, no hay forma de que su dinero genere ganancias pues es con el que se está pagando al grupo etario que día a día cumple su tiempo laboral y llega la hora de retirarse.

Todo lo anterior traerá graves consecuencias, ya que ese dinero no alcanzará ni para sobrevivir. Se escucha en diferentes sectores que el estado no tiene dinero y que a corto plazo hará uso de esos fondos.

Solo el tiempo lo dirá sin embargo parece que así será ya que ante el despilfarro que ha existido, la economía del país ha colapsado y tristemente, será la clase trabajadora la que sacará como siempre la peor parte.

Vivimos del día a día, donde el consumismo rige nuestras vidas y poco se tiene la cultura del ahorro. Sé que no es fácil y que ese hábito de ahorro en un país donde estamos con la canasta básica más cara en este momento ahorrar es casi utópico.

Ahora tenemos jóvenes que ni estudian ni trabajan y viven bajo el mismo techo con los padres, sin tener la menor idea de que les espera una tragedia pues sobrepasan los treinta años y no tienen idea de la importancia de cotizar, de prever el futuro, de hacerse de una casa que por sencilla que sea, día a día gana valor a diferencia de otros bienes, que en un segundo se desploma su valor.

Por el momento nadie sabe cual será el futuro de las pensiones. Nadie repara en que, para un país empobrecido a más no poder, será dentro de poco, un castillo de arena el que caerá y sepultará a todos los cotizantes, que creyeron en un sistema  que por sí mismo no era malo y en ese momento era necesario cambiar de modo de administrar y que aun, tuvieron claras señales de que todo lo que vivimos en este momento, estaba avisado, daba señales y aun, hay muchísimos que creen que sus pensiones serán más altas de lo que por ley les corresponde.

Será durísima la realidad, la falta de expertos con visión del comportamiento demográfico así como las proyecciones adecuadas y la administración del dinero y del fondo de pensiones el uso que le dan los gobiernos cada vez que se necesita, es lo que nos lleva ha tener miedo a la vejez pero el miedo debe ser a la vejez desprotegida.