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Vanidad de Vanidades

No olvidemos que la vanidad no es más que un estorbo en la vida. Con que usted haya contribuido al triunfo de la verdad y de la justicia, a la difusión de la cultura, al acrecentamiento del saber, habrá hecho cien veces más que los amigos de la vanidad

Por Carlos Alberto Saz

Y todo es vanidad,  como dice La Biblia. Sí, el ser humano, desde épocas remotas está enfermo de vanidad, de egoísmo, de envidia, de celos, de inseguridad, de odio y todo lo demás que degenera el raciocinio, el pensamiento claro, el entendimiento y las buenas costumbres.

          Por eso se dice que “El mundo está loco, loco”, tal como reza el título de una película.

          Claro: el mundo está loco de vanidad y de todas  las demás   conductas que denigran y enferman y el espíritu.

          El término ‘vanidad’ se define como “Calidad de vano. Fausto, ostentación. Palabra inútil e insustancial. Vana representación, ilusión o ficción de la fantasía.

          Y vanidoso es todo aquel que tiene vanidad y la da a conocer.

           Y ‘vano’ es un adjetivo que indica “Falto de realidad, sustancia o entidad. Hueco, vacío y falto de solidez. Dícese de algunos frutos de cáscara cuando su semilla o sustancia interior está seca o podrida. Inútil, infructuoso o sin efecto. Arrogante, presuntuoso. Insubsistente, poco durable. Que no tiene fundamento, razón o prueba”.

“En vano” es una locución adverbial que indica “Inútimente, sin logro ni efecto. Sin necesidad, razón o justicia”.  

Pues bien, volviendo al tema, he aquí algunas vanidades de este mundo: Un elegante vestido de novia que usó en una película Marilyn Monroe fue vendido en subasta, nada menos que por la friolera de cuatro millones de dólares”. ¡Vanidad de vanidades!, pues hay países pobres como la India y Puerto Rico en donde la gente sufre hambrunas por falta de alimentos.

Todo lo contrario de vanidad es humildad, sinceridad, honestidad, modestia, sencillez, encogimiento, naturalidad, comedimiento.

          Y otros ejemplos de pura vanidad son las diez joyas más caras vendidas en subastas.

          El reportaje periodístico dice así: “Echemos un vistazo a las diez   alhajas consideradas “raras maravillas naturales” que han alcanzado los precios más exorbitantes en prestigiosas casas de subastas”.

          Los siguientes diamantes: “The pink star”, fue vendido por 71.2 millones de dólares, “The oppenheimer  blue, por 57.5 millones. “The Winston Pink Legacy, 50.7 mill. “The Blue Moon of Josephine, 48.4 mill. “The Graff Pink”, 46.1 mill. “Memory of Autumn Leaves &Dream of Autumn Leaves, 57.4 mill. “The Prince Diamond, 39.3 mill. “Queen Marie Antoniettes Pearl”, 36.2 mill. “The Orange”, 35.5 mill. “Collar de diamantes y esmeraldas de Grisogono”, 33.7 millones.

          Podrá verse, pues, cuánta vanidad hay en este mundo.  No olvidemos que la vanidad no es más que un estorbo en la vida. Con que usted haya contribuido al triunfo de la verdad y de la justicia, a la difusión de la cultura, al acrecentamiento del saber, habrá hecho cien veces más que los amigos de la vanidad. ¡Sí, señor!

Maestro, psicólogo, gramático.

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