Trabajadores de la Alcaldía de La Unión desconfían de la firma del acuerdo del concejo municipal de La Unión para el retiro voluntario de los trabajadores, y el pago de una indemnización con un valor de un salario mensual del empleado por cada año de servicio prestado a la comuna, hasta por un máximo de $10,000.
Los empleados dudan de lo planteado debido a los problemas financieros que ha enfrentado la comuna desde hace tres años, aseguraron.
Según los trabajadores, la mayoría no se anima a presentar la renuncia voluntaria debido a que hay desconfianza, sobre todo cuando dicho acuerdo se da en momentos en que la alcaldía está en el proceso de transición de la llegada de una nueva administración. Además de que no cuentan con los fondos para el pago inmediato de las indemnizaciones.
“Yo tengo dudas, primero tomando en cuenta que la nueva administración que llegue no respete el acuerdo por algún vacío legal, tampoco eso se incluyó en el presupuesto que tuvieron que haberlo aprobado en el 2023, y también porque esta alcaldía no tiene liquidez económica; es decir, no tienen dinero para pagar”, dijo un empleado que prefirió no revelar su identidad por posibles represalias.
El pasado 6 de marzo, durante la sesión ordinaria el concejo municipal, se acordó por una mayoría de ocho votos que la municipalidad pueda otorgar un reconocimiento económico a los empleados que desean renunciar a su cargo. Pueden hacerlo para el periodo desde el 7 de marzo hasta el 30 de abril.
En dicho acuerdo salvan sus votos Ana Julia Sorto de Perla, primera regidora propietaria, y Yessenia Elizabeth López de Torres, segunda regidora propietaria, ambas por el partido de Nuevas Ideas (NI).
El alcalde Óscar Parada, por el partido de Nuevas Ideas (NI), dijo que desde el primer año de su administración, que inició en el 2021, han tomado en cuenta que los empleados que quieran renunciar voluntariamente puedan hacerlo sin ningún problema y que tendrán un beneficio económico por lo años laborados en la alcaldía. En el primer año, de dicho acuerdo, renunciaron aproximadamente 11 personas.
Según Parada, solo dos empleados de los puestos de confianza son los que ya presentaron sus renuncias. “Hay personas que están en ésta municipalidad que tienen derecho hasta de $25,000, pero nosotros viendo la situación real financiera no podemos otorgar más del monto de los $10,000, y por esa misma razón también se llega a un acuerdo de pago con el empleado que renuncie, no se hace un pago a inmediatez”, manifestó el alcalde.
José Sánchez Pineda es gestor de cobro de la Unidad Tributaria Municipal. Dice que ya pasó por una mala experiencia con el acuerdo de retiro voluntario en el año 2022, debido a que su compensación económica, que era de un aproximado de $8,000, se la pagaron en seis cuotas durante un año.
Sánchez Pineda regresó a laborar por contrato para un año a petición de la alcaldía porque no encontraban a otro gestor de cobros que realizara las tareas como él.
“Les aconsejo a los compañeros trabajadores que no se atengan porque se retiran sin dinero y acumulando más deudas en las tiendas; porque la alcaldía no les pagará a corto plazo. Y que no lo hagan mientras no tengan ese desembolso en mano”, señaló el empleado.
En otro de los municipios unionenses, que desde el 1 de mayo será distrito de San Alejo de la alcaldía La Unión Sur, también el concejo municipal firmó un acuerdo para compensar económicamente a los trabajadores que renuncien de forma voluntaria.
El alcalde Inmar Barrera, por el partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), confirmó que la compensación económica por retiro voluntario de los empleados es de un salario mínimo. “Casi que el 25 por ciento de lo que ha ganado la persona si es retiro voluntario”, manifestó.