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A pesar del anuncio de austeridad que hizo el presidente de la Asamblea, Ernesto Castro, en mayo de 2021; en octubre de ese mismo año, el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, solicitó a los diputados auto aprobarse un refuerzo presupuestario de $2 millones para poder saldar cuentas “impostergables”.
Según la solicitud de Hacienda, el objetivo era dar cobertura a varios requerimientos de alta importancia y emergentes de diferentes unidades organizativas de la Asamblea, en lo que restaba de 2021.
“Cabe señalar que dichos recursos también serán utilizados para dar cobertura a obligaciones de corto plazo que se han contraído con proveedores o que eventualmente podrían adquirirse en lo que resta del presente año y que serían de carácter ineludible”, argumentó Zelaya en ese entonces.
De los fondos reorientados, $1.4 millones fueron para administración financiera e institucional; $567,942 para el área de comunicaciones; y $122,950 para el pleno, comisiones y asistencia legislativa.
Con este incremento el presupuesto de la Asamblea de 2021 pasó de $58.3 millones a $60.3 millones, incluso mucho más de lo que las anteriores legislaturas habían usado.
En el Portal de Transparencia de la Asamblea se logró identificar cuáles han sido los presupuestos asignados, luego de meses en que los parlamentarios no conocieron el documento del gasto asignado para 2022.
En este se puede observar que en comparación con el resto de años anteriores el monto asignado en 2022 es menor que en los periodos recientes.
Para ese año fue de 57.6 millones, es decir, una disminución de $700 mil, a pesar que la promesa de Castro fue de bajarlo en $7 millones.