Una grabación de la sesión de Corte Plena del 8 de febrero día en que despojaron de sus facultades como presidente del Órgano Judicial a Óscar López Jerez, dejó al descubierto la pugna que hay entre magistrados y jueces sobre la contratación de personal y sus capacidades para desempeñar sus cargos.
En la misma grabación se exponen los resultados del trabajo realizado por una Comisión de Jueces conformada por varios magistrados, la cual había recogido reclamos de jueces de la zona oriental y paracentral sobre múltiples necesidades que van desde el mal funcionamiento de computadoras, techos de algunos juzgados dañados, falta de aires acondicionados en sedes judiciales hasta la ausencia de un referente a quién acudir para resolver dichos problemas y falta de apoyo de parte de la Corte Suprema de Justicia.
“Créanme que la herencia que hay en esta institución realmente da tristeza. No estoy diciendo que lo que estoy haciendo como presidente es perfecto, no. Eso que lo digan terceras personas. Pero creo que tenemos administradores de centros integrados que realmente creo que no tienen ni la idoneidad ni la voluntad de administrar bien esos centros integrados”, alegó el magistrado presidente.
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López Jerez dijo que la Corte Suprema de Justicia tiene 11,000 empleados y que estaba revisando los perfiles de todos los empleados. “Hay una cantidad enorme, nada menos estoy revisando los perfiles de todos los empleados, son 11,000 empleados, si son profesionales o no, pero es increíble lo deficiente que está esta Corte Suprema de Justicia”, expuso el funcionario.
“Yo sé por dónde va la cosa”
López Jerez cuestionó si la Comisión de Jueces tenía la facultad de andar inspeccionando cuestiones administrativas de los tribunales, porque estaba la Comisión de Modernización. El funcionario afirmó que los problemas administrativos que adolece el Órgano Judicial no se resolverían en ocho meses, un año o año y medio.
“Esto viene de añales. Ustedes no saben la cantidad de gente que hay contratada en esta corte que no tiene ni siquiera estudios universitarios. Hay muchos bachilleres ¿por qué? porque cada magistrado que viene trae una cantidad de personas a sabiendas que no tiene capacidad alguna o conocimiento, los contratan, les colocan salarios bastante altos; aquí vienen por amistad, por parentesco, parientes por consanguinidad o afinidad… El punto es que allí están”, puntualizó.
El presidente de la CSJ afirmó que con todos esos recursos se podrían tener instalaciones perfectas en todos los juzgados.
De acuerdo con fuentes judiciales consultadas, el nepotismo en el Órgano Judicial podría ser peor que en cualquier otro Órgano de Estado, pues hay jueces, magistrados y jefes que han logrado colocar a sus parientes en diversas dependencias del mismo.
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Por ejemplo, citaron, una forma de encubrir el nepotismo en la CSJ es que muchos jueces tienen como empleados en las sedes judiciales a su cargo a parientes de otros jueces a cambio de que éstos últimos también hagan lo mismo.
Un ejemplo de ello, citaron los informantes, es el caso de un magistrado de Cámara de la zona oriental que había logrado colocar como secretario a uno de sus hijos en un juzgado de lo Civil y tenía a la amante con empleo de colaboradora jurídica en un Tribunal de Sentencia. Él retribuía esos favores de igual forma a los jueces que le habían ayudado con sus parientes.
Se perdieron millones el año pasado
En la misma sesión, López Jerez informó al pleno que el año pasado se perdieron aproximadamente $60 millones que pudieron ocuparse para la construcción de infraestructura para mejorar el funcionamiento del Órgano Judicial.
“En parte, por culpa del anterior director de Infraestructura, se perdieron inclusive, dos cantidades creo que entre 20 o 30, en total creo que fueron como $60 millones los que se perdieron para poder construir un par de centros judiciales, por negligencia de esa persona. Este anterior director de Infraestructura ya no está en el cargo. Lo que hizo fue totalmente reprochable”, detalló.
Asociación de jueces en el centro judicial
El desorden que impera en el Órgano Judicial es tal que en la misma sesión consta, según el audio de la misma, que en el propio Centro Judicial Isidro Menéndez, de San Salvador, una asociación de jueces, al 8 de febrero anterior, tenía un local para su propio uso.
Según el magistrado Nahum Martínez, la oficina de esa asociación funciona en el Edificio A2, atrás del Tribunal Primero de Sentencia. Ante la pregunta del presidente de la CSJ de si se sabía cuál era esa asociación, el magistrado Martínez respondió que era AMJUES y que hasta una placa tenía en la puerta del local.
“Es inconcebible cómo una asociación de jueces, que no entiendo qué beneficio le trae al órgano judicial, tiene un espacio atrás del Tribunal Primero de Sentencia , cuando si ustedes van al Tribunal Primero de Sentencia, hasta en la secretaría donde llegan los usuarios hay cajas. Por qué se ha permitido que una asociación de jueces tenga un espacio allí; no entiendo, no trae ningún beneficio, no tiene nada que ver con la función del órgano jurisdiccional”, puntualizó el funcionario.