Alejandra es graduada de Psicología y Medios de Comunicación de Southern Methodist University en Dallas, Texas. Cuenta con estudios gerenciales en INCAE Business School, Certificación de Coach de Salud del Institute for Integrative Nutrition así como otros Diplomados en temas como Empatía e Inteligencia Emocional. Empezó su carrera en RRHH hace un poco más de 10 años y actualmente es Directora de RRHH en Teleperformance para El Salvador y Guatemala, donde también lidera proyectos regionales.
“Personalmente creo que hemos avanzado mucho en el tema de derechos a favor de la mujer. Las nuevas generaciones también vienen con una mentalidad distinta, pero creo que el reto más importante sigue siendo enfrentarnos al entorno”, confiesa Alejandra
cuando hablamos sobre los retos de la mujer en la actualidad. “No todas las mujeres y niñas tenemos el privilegio de tener un espacio seguro para desarrollarnos. Tanto hombres como mujeres debemos fomentar estos espacios seguros e igualitarios para todos”, agrega.
En cuanto al mayor reto al que se ha enfrentado en la vida cree que “la vida presenta muchos retos”, pero la pandemia fue un momento difícil en el que vio enfrentada su vida familiar y sus aspiraciones profesionales. “Ha sido un tiempo muy retador”, confiesa Alejandra.
Ingresar al mundo corporativo fue un momento de transformación personal y profesional, cuenta. “Yo creo que cada decisión que
tomamos cambia nuestra vida. No era algo que tenia planificado para mi vida, pero así ocurrió y he tenido la bendición de trabajar en compañías, como Teleperformance, que me han permitido desarrollar mi talento, que han creído en mí. Es un privilegio que pocas tienen el poder trabajar en ambientes justos, igualitarios y con mucho liderazgo femenino”, puntualiza.
Al hablar en materia de derechos para las mujeres esta experta en RRHH expresa: “Hay más visibilidad para las mujeres, hay más mujeres líderes en los diferentes ámbitos de la sociedad, pero me parece inconcebible que en otras latitudes las mujeres no tengan garantizados derechos básicos como la toma de decisiones autónomas o el acceso a la educación. Debemos mantenernos unidas y así acortar la brecha entre hombres y mujeres”.
“Siempre que hablo con mujeres jóvenes les digo que sean auténticas y valientes. Esto les ayuda a tomar decisiones alineadas con la vida que ellas desean construir. Cuando se vive de esta forma la mayoría de las decisiones las habremos tomado con la certeza de ser sinceras con nosotras mismas”, dice.
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EN CORTO
Su mayor sueño de niña: “Soñaba con ser mamá, ser cantante y bailarina. Siempre soñé sin límites”.
Su principal virtud: “El agradecimiento. Es algo que expreso todos los días”.
El mundo que le gustaría heredar a las futuras generaciones: “Un mundo en paz, justo y con más participación de mujeres en espacios de decisión”.
La mayor lección aprendida de su madre: “Muchas y muy acertadas, pero me quedo con su ejemplo de libertad y autonomía”.