Dulce de chilacayote salvadoreño: tradición con sabor ancestral

El dulce de chilacayote es uno de los postres típicos más emblemáticos de El Salvador. Cristalino, acitronado y profundamente aromático, este dulce tradicional se prepara a fuego lento hasta lograr una textura brillante por fuera y suave por dentro. Más que una receta, representa un legado cultural que conecta generaciones salvadoreñas, conservando el sabor de nuestras raíces en cada trozo de fruta impregnado de almíbar.

Aunque su preparación requiere tiempo, su sabor lo compensa con creces. Es ideal para acompañar con café o para compartir en familia, y sigue siendo infaltable en las fiestas patronales de muchos pueblos salvadoreños. Si querés revivir esta tradición desde tu cocina, aquí te dejamos una receta casera paso a paso.

Receta de dulce de chilacayote

Tiempo de preparación: 4 horas

Ingredientes:

1 chilacayote de 2 libras

8 libras de azúcar

15 botellas de agua

½ taza de cal

Preparación:

Golpeá el chilacayote con un mazo para soltar la cáscara. Pelalo y partilo en pedazos. Colocalo en un recipiente con agua y añadí la cal. Dejalo reposar durante 6 horas para que se acitrone. Luego enjuagalo bien y escurrilo.

Aparte, prepará el almíbar mezclando el azúcar con las 15 botellas de agua. Llevá al fuego hasta que hierva. Agregá el chilacayote y cociná a fuego lento hasta que la miel espese. Podés dejarlo con toda la miel o colarlo, según tu preferencia.

El chilacayote, una calabaza de la familia de las cucurbitáceas, es una planta trepadora y rastrera cuyo nombre en náhuatl (tzilacayotli) significa “calabaza lisa”. Su uso en la cocina varía según su grado de madurez y la parte que se aproveche: cáscara, semillas o pulpa.

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