Con un disfraz de contribución especial se pretende crear un impuesto del 5 % a la comida rápida y a productos plásticos y desechables.
Se trata de la iniciativa de “Ley especial de atención integral para los pacientes oncológicos” presentada por la diputada Milena Mayorga, quien ha sido designada por el presidente Nayib Bukele como embajadora de El Salvador en Washington, EE.UU.
De acuerdo al documento, en su Título XI Contribución Especial, artículo 49, dice: “Se establece una contribución especial para la atención integral contra el cáncer, en adelante la contribución, la que será de un cinco por ciento (5 %) y se aplicará a la base imponible determinada, los diversos hechos generadores serán el valor de la contraprestación, excluyendo el impuesto a la Transferencia de Bienes Muebles. Dicha contribución especial tendrá una vigencia de veinticinco años”.
La iniciativa fue presentada por Mayorga el pasado 26 de octubre a la Asamblea Legislativa, donde será discutida en el seno de la comisión de Salud.
Economistas como Rafael Lemus apuntan que “con esta iniciativa se está queriendo disfrazar de contribución especial un impuesto, es un incremento al IVA de manera diferenciada”.
Lemus explicó que “la contribución está asociada a una retribución, a una contraprestación, pero en este caso todos los que consuman comida rápida o adquieran bolsas, botellas plásticas, desechables, no verán nada a cambio de prestación, recibirán nada por ese impuesto, y los que contribuyan a ese impuesto, en primer lugar, serían millones y los afectados por esta enfermedad del cáncer es una cantidad mucho menor, entonces ahí es donde se rompe la definición de contribución”.
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También el economista y exministro de Hacienda, Manuel Enrique Hinds, dijo que al no cumplir con la esencia de contribución es un “impuesto inconstitucional”.
“Es inconstitucional porque es un impuesto y todos los impuestos tienen que ir a la caja central de la tesorería. Sería válido si fuera una contribución y esto no lo es, esto es clarísimo que es un impuesto. No se debe disfrazar una contribución con un impuesto”, señaló Hinds.
Lemus agregó que con este tributo lo que se está imponiendo es un incremento al IVA de forma diferenciada. Explicó que tratar de recaudar más fondos bajo la figura de contribución especial es como incrementar el IVA a todos los que consuman, por ejemplo, papas fritas o pizza porque ya no pagarían 13% sino 18 %, por lo que terminarían pagando más impuesto quien consuma comida rápida que alguien que compre una lancha.
La iniciativa de ley agrega en su artículo 51 que: “Son sujetos pasivos y por lo tanto obligados al pago de las contribuciones contenidos en esta ley, los productores e importadores de los bienes considerados en el Art. 50 y las cadenas de restaurantes y restaurantes que se dediquen a la venta de comidas con altos contenidos calóricos…”.
Para Lemus es claro que quien está detrás de todo esto es el gobierno, pues Mayorga es su embajadora y además disidió de ARENA hace tiempo. “Y es que este gobierno dice que no va a poner impuestos, pero en el último mes ha presentado dos iniciativas de subir impuestos: la de grandes contribuyentes, porque el gobierno lo planteó oficialmente por medio del ministro de Hacienda para elevar la tasa de contribución del 5 % al 8 %, lo que es ilógico en esta recesión”, dijo el economista.
El economista recalcó que solo en el segundo trimestre el país cayó 19 % y que actualmente sigue abajo con 12 % y lo que menos debe hacer el gobierno es tratar de imponer impuestos.
Agregó que este tipo de estrategias del Ejecutivo lo único que hacen es alejar más la inversión tanto extranjera como local, lo que provocará aún más la tardanza en la recuperación de la economía y de empleos en el país.
Papas fritas, golosinas, jugos, néctares, platos pajillas, etc. pagarían el 5 %, según Artículo 50 de la iniciativa:
a) Los bienes producidos o importados considerados como comida “chatarra”, es decir que no generan ningún tipo de valor nutricional como las golosinas dulces o saladas, caramelos de cualquier tipo, chicles, chocolates o energizantes, jugos, néctares, refrescos y preparaciones concentradas o en polvo para la elaboración de bebidas.
b) El consumo de productos considerados como “comida rápida” que utilizan aceite reutilizable para la preparación de alimentos, o ácido graso insaturado, uso de productos industrializados que han sido sometidos a hidrogenación, con altos contenidos calóricos como los pollos fritos, papas fritas, hamburguesas, pizzas y otros tipos de comidas fritas.
c) La producción o importación de productos plásticos desechables o de un solo uso, como platos, cubiertos, pajillas, removedores y otros que se utilicen para el consumo o comercialización de alimentos en general.
d) La producción o importación de botellas o bolsas pláticas que sean utilizadas para la elaboración o comercialización de bebidas alimenticias, incluyendo para el consumo humano.
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