La vida ha cambiado desde que el COVID-19 se propagó en todo el mundo. La normalidad está trastocada y la convivencia social ha sido puesta a prueba. Cosas tan cotidianas, como buscar alimentos, llenar las alacenas y hacer las compras son ahora acciones de mayor riesgo.
Las filas para acceder a establecimientos de comida en algunos países de Europa son extensas y distanciadas, reflejo de lo duro de la pandemia, pero también de las medidas de precaución que deben acatarse. El Salvador contabilizó la noche del miércoles su primer caso y la cuarentena podría alargarse.
Pese al estrés de presenciar un escenario conmocionado, siempre hay cosas positivas. Así lo cree el consultor gastronómico salvadoreño, Jorge Cipactli Alvarado, quien explicó que debemos “entender que tenemos casa”, ya que es una de esas cosas que deberían de cambiar a raíz de la pandemia.
Según Alvarado, la modernidad y el apresurado ritmo de vida instauró una mala alimentación. “Esa ansiedad de estar fuera no nos invitaba a quedarnos en casa y se traducía en la cocina. Comemos (o comíamos) mucho fuera de casa”, expresó.
Y en efecto, el desayuno o no se hace o se compran pupusas, el almuerzo jamás se lleva de casa al trabajo, en la noche podría pasar comprando comida rápida, y así la rutina.
El confinamiento no permitirá esta “libertad alimenticia” y deberá sacar la mayor creatividad para poder conservar la comida y para ofrecer al resto de familia platos saludables —para fortalecer el sistema inmunológico— y, evidentemente, para no agobiar el paladar con un menú poco apetecible.
Para el experto, es importante tener comida en preservación, y por ello recomienda tener salsas o mermeladas en botes vidrio. Las salsas, que puedes preparar perfectamente en casa y a tu gusto, se convertirán en un acompañante idóneo para algunas de tus comidas.
El primer paso será lavar bien los ingredientes y las ollas que se utilicen. Luego se deberá sumergir en agua hirviendo (100°) recipientes de vidrio, de preferencia aquellos que tienen tapas con botón. Cuando estén listos, deberás colocar la salsa, y poner el envase hacia abajo y colocarlo nuevamente en agua durante 35 minutos si vive en la zona paracentral, esto para crear un sello atmosférico.
“Esto hará un tapón que no permitirá que entren bacterias y durará, por lo menos, tres meses sin refrigeración”, explicó el experto.
Por otro lado, Alvarado reconoció que las pastas son excelentes alimentos para tiempos de encierro debido a su durabilidad. Estas pueden ser acompañadas con atún, pollo, carne, vegetales y “si no hay nada solo con queso y salsa”.
A esta opción se añaden las legumbres, también perdurables y con un alto grado de nutrientes y proteínas, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), “por lo que son una fuente ideal de proteína”, en particular en tiempos donde la carne y los lácteos no son física o económicamente accesibles.
Alvarado señaló que las legumbres son un alimento base de la dieta salvadoreña, pues los frijoles (blancos también) forman parte de este grupo. A ellos se suman los garbanzos, las arvejas, la soja, los ejotes, el maní, entre otros.
“Con la FAO hicimos un recetario de legumbres, donde se dejó en evidencia el dinamismo de las legumbres, incluyendo hasta recetas dulces. Si tiene legumbres en casa no se puede aburrir”, dijo el consultor haciendo referencia a la diversidad de platos que pueden elaborarse únicamente con frijoles: sopa, casamiento, licuados, borrachos, ensaladas y más.
Las frutas y verduras no quedan excluidas de la cuarentena. Aunque son más delicados, Alvarado reconoció que hacerlas en paletas o deshidratas ayudaría mucho a su preservación. “Ponga la fruta al sol durante dos días y la cubre con un mosquitero. Pronto tendrá un producto seco. A las cáscaras de papa y manzana puede agregarles un poco de sal y aceite y las pone al horno, y ya tendrá chips”, añadió.
Compartimos otras recetas fáciles de Alvarado, las que podrás elabora durante la cuarentena.
Ensalada de frijoles
Ingredientes:
1 taza de frijoles (negros, rojos o blancos).
½ taza de tomates cortados en cuadros.
¼ unidad de cebolla morada cortada en cuadros.
2 unidades de aguacate cortados en
cuadros.
1 limón.
1 manojo de espinaca.
½ taza de elote amarillo dulce
Una pizca de sal y pimienta.