Costa Rica amarga el sueño dorado de la Selecta femenina en los Juegos Centroamericanos
El Salvador se quedó con la medalla de plata al perder 1-0 contra Costa Rica con gol de Sofía Varela en la final del fútbol femenino en los XII Juegos Centroamericanos Guatemala 2025.
Por
Roberto Montano
Publicado el 29 de octubre de 2025
La selección femenina de El Salvador se quedó con la medalla de plata en el fútbol 11 de los Juegos Centroamericanos Guatemala 2025, tras caer 1-0 ante Costa Rica en la final disputada este miércoles. El único gol del partido llegó al minuto 31 por medio de Sofía Varela. Las salvadoreñas, que venían de vencer a Nicaragua en semifinales, dominaron gran parte del segundo tiempo y estuvieron a punto del empate con un remate al poste en el minuto 90. A pesar del resultado, la plata representa un logro histórico y un reconocimiento al esfuerzo del grupo dirigido por Eric Acuña.
La selección femenina de El Salvador no pudo coronar con oro su destacada participación en los XII Juegos Centroamericanos Guatemala 2025, al caer 1-0 ante Costa Rica en una final muy disputada y de gran intensidad. El combinado cuscatleco, dirigido por Eric Acuña, luchó de principio a fin, pero un solitario gol costarricense terminó marcando la diferencia.
Tras eliminar a Nicaragua en semifinales, la Selecta llegaba con ilusión y confianza para enfrentar a unas ticas con amplia experiencia internacional. El once inicial estuvo conformado por Idalia Serrano, Vasthy Delgado, Elaily Hernández, Nicolle Amaya, Alejandra Chirino, Danielle Fuentes, Victoria Sánchez, Brenda Cerén (capitana), Elizabeth Johannes, Danya Gutiérrez y Laila Saravia.
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Un primer tiempo cerrado y un golpe doloroso
El encuentro arrancó con buen ritmo y equilibrio. Ambas selecciones intentaron imponer su estilo desde los primeros minutos, pero fue Costa Rica quien logró romper la paridad al minuto 31, cuando Sofía Varela aprovechó un espacio en la defensa salvadoreña para marcar el único gol del partido.
El tanto obligó a las salvadoreñas a adelantar líneas y buscar el empate con intensidad. Sin embargo, el orden defensivo de las ticas y la seguridad de su guardameta evitaron que El Salvador pudiera concretar sus llegadas antes del descanso.
Reacción salvadoreña sin premio
En la segunda mitad, la Selecta femenina salió decidida a igualar el marcador. El equipo nacional mostró actitud, entrega y carácter, adelantando líneas y presionando en campo rival. Las combinaciones entre Brenda Cerén, Danya Gutiérrez y Victoria Sánchez generaron varias aproximaciones de peligro que pusieron en aprietos a la defensa costarricense.
El momento más claro llegó en el minuto 90, cuando un potente disparo de media distancia se estrelló en el poste superior, silenciando por un instante las gradas. Fue la última gran oportunidad antes del pitazo final que confirmó la victoria tica y dejó a El Salvador con la medalla de plata.
Una plata con sabor a orgullo
Aunque el desenlace no fue el deseado, el equipo salvadoreño cerró una campaña destacada en Guatemala 2025. La medalla de plata simboliza el progreso y la competitividad del fútbol femenino nacional, que continúa ganando terreno en la región.
Las jugadoras mostraron un juego ordenado, compromiso y una entrega total a lo largo del torneo. “Esta medalla representa todo el esfuerzo, las horas de trabajo y el amor por nuestro país”, expresó una de las seleccionadas al finalizar el encuentro.
El técnico Eric Acuña felicitó al grupo por su entrega y destacó la actitud del equipo: “Nos vamos con la cabeza en alto. Jugamos de tú a tú con una selección muy fuerte y demostramos que El Salvador tiene talento para competir al más alto nivel”.
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Un paso más hacia la consolidación del fútbol femenino salvadoreño
La actuación en los Juegos Centroamericanos marca un nuevo capítulo en la historia de la Selecta femenina, que sigue sumando experiencia internacional y consolidando una base sólida para futuros torneos.
El Salvador cerró su participación con una medalla de plata histórica, que refleja no solo el crecimiento deportivo, sino también la unión y el sacrificio de un grupo de futbolistas que dejó todo en la cancha.
En El Sunzal y en cada rincón del país, esta generación de jugadoras ha demostrado que el fútbol femenino salvadoreño está más vivo y fuerte que nunca.