Día Mundial del Agua

Marzo contempla una fecha importante  hoy: el Día Mundial del Agua, fundamento de vida, elemento de la naturaleza, integrante indiscutible de los ecosistemas naturales, parte fundamental para la sostenibilidad y reproducción de la vida en el planeta tierra, y así sucesivamente podemos mencionar un sinfín de elogios, buenos términos y referencias positivas en alusión al agua.

Sin embargo, cuando se habla de un recurso como el agua debemos reflexionar sobre cuán indispensable es para nosotros en el día a día y que estamos haciendo para poder hacer buen uso del mismo. El agua toca diversas aristas que muchos nunca podríamos imaginarnos; por ejemplo, la economía, ya que sin agua el comercio y las actividades como la agricultura, pesca, producción de energía, la industria, entre otras, no podrían llevarse a cabo, generado estragos irreversibles para nuestras sociedades.

Solamente si lo delimitamos en nuestra vida cotidiana y enumeramos las veces que requerimos de este recurso, serán innumerables las respuestas que podríamos brindar. Lo anterior significa que el recurso hídrico es incuestionablemente parte de nuestro diario vivir. Por lo tanto, es un elemento crucial para la humanidad y para el resto de los seres vivos, siendo parte indispensable para el desarrollo de procesos biológicos en nuestro ecosistema.

Aunado a lo anterior, cuando vemos la contaminación del agua y su escasez, indican un alto grado de amenazas para la salud humana y la vida de los hábitats del planeta. Mucho se escucha hablar sobre las diversas maneras en que este recurso vital no es debidamente cuidado, pero ¿qqué podríamos hacer nosotros para erradicar esas malas prácticas? Hay diversas formas, que van desde el uso racional de implementos que consumen excesivamente el agua, hasta la potabilización de la misma para consumo humano.

El proteger el recurso hídrico se vuelve tarea de todos/as. El estado si bien es cierto debe ser quien encarrile y conduzca políticas públicas y de salud enfocadas al buen uso y cuido del agua, somos las personas las que tenemos que tomar conciencia de lo que podríamos estar llegando a perder si este recurso en un momento determinado deja de existir. Pasaríamos a la desaparición de especies vegetales hasta la escasez de alimentos, afectación a la agricultura, ganadería e industria en general, sin mencionar las enfermedades, migraciones masivas, hambre y conflictos que se generarían.

Se vuelve menester y punto clave en una agenda de país, que se fomente la cultura y educación para el buen uso y cuido del agua. Solamente de esa forma se podrán ejecutar otros mecanismos de acción que puedan resultar favorables para preservar este recurso. Fomentando el agua como fuente de vida, cultura y bien común, no como una mercancía, garantizándose el acceso para todos/as en aras de la subsistencia y los procesos naturales. Recordemos que tomar agua nos da vida, pero tomar conciencia nos da agua, cuidémosla.

Abogado, Master en Tributación Internacional y Asesoría Jurídica de Empresas, Decano de la Universidad Nueva San Salvador.