Quema de toritos pintos cierra las fiestas patronales de Quezaltepeque

La noche del viernes, Quezaltepeque vivió el cierre oficial de sus fiestas patronales con una de las tradiciones más arraigadas y esperadas por la población: la quema de toritos pintos y el espectáculo de fuegos artificiales. Desde tempranas horas, el casco urbano comenzó a llenarse de familias completas, jóvenes y visitantes que llegaron para despedir varios días de celebración marcados por actividades culturales, religiosas y artísticas.

El cierre de las festividades inició con los actos religiosos en honor al patrono San José. Durante la tarde se celebró la solemne misa patronal, seguida de la procesión por las principales calles de la ciudad, un recorrido que congregó a feligreses y vecinos que acompañaron la imagen del santo en un ambiente de recogimiento y tradición.

Más tarde, frente al parque central, se realizó el descubrimiento del santo patrono, uno de los momentos simbólicos que antecede al cierre festivo. Conforme avanzó la noche, la atención de los asistentes se trasladó al espectáculo pirotécnico, con la quema del castillo como antesala a la salida de los toritos pintos.

La quema de toritos se desarrolló en el recorrido comprendido entre la avenida 3 de Mayo y la plaza Centenario, una zona que cada año se convierte en el punto central de esta actividad. Entre chispas, luces y el sonido de la pólvora, los toritos avanzaron rodeados por decenas de personas que, como es tradición, se acercaron para vivir de cerca la adrenalina que caracteriza este evento.

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Sin embargo, la intensidad del espectáculo y la cercanía del público provocaron múltiples incidentes. De acuerdo con un comunicado de Comandos de Salvamento, al menos cien personas resultaron con quemaduras de primero y segundo grado durante la quema de toritos pintos. Entre los lesionados se contabilizaron niños, adultos y personas mayores, siendo 65 de los afectados menores de edad.

Los cuerpos de socorro detallaron que la mayoría de las atenciones se realizaron en el lugar, donde se instalaron puntos de primeros auxilios para atender a los afectados. Los casos más graves tuvieron que ser trasladados a centros asistenciales, entre ellos unidades del Fondo Solidario para la Salud (Fosalud), para recibir atención especializada.

Cruz Roja Salvadoreña también brindó apoyo durante la jornada, atendiendo a personas con quemaduras y otras lesiones relacionadas con la pólvora. Los equipos de emergencia permanecieron desplegados durante todo el desarrollo de la actividad, ante la constante afluencia de público en el área.

A pesar de los incidentes, el evento continuó bajo la supervisión de los cuerpos de socorro y las autoridades locales. El espectáculo de fuegos artificiales iluminó el cielo de Quezaltepeque y marcó oficialmente el final de las fiestas patronales, acompañado por música y la despedida de los asistentes que permanecieron en el parque central y calles aledañas.

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El cierre de las celebraciones también incluyó el recorrido de las soberanas electas. Cinthya Orellana, Reina de los Festejos Patronales; Adriana Ruano, Reina de la Juventud; y Maya Menjívar, Reina de La Libertad Norte, desfilaron en carrozas por las principales calles del casco urbano, acompañadas de sus cortes de honor. Al recorrido se sumó Lexy Díaz, Reina de Quezaltecos en el Exterior, en representación de la diáspora que cada año regresa para compartir y mantener vivas las tradiciones de su municipio.

Las fiestas patronales de Quezaltepeque iniciaron el pasado 10 de diciembre con el tradicional Desfile del Correo y una noche bailable gratuita. Durante varios días, la ciudad vivió una intensa agenda que incluyó la Tarima de la Alegría con presentaciones de artistas locales y nacionales, noches temáticas como la Noche Ranchera, el Carnaval y recorridos de carrozas con las reinas de los subcomités.

El componente religioso tuvo un papel central en la recta final de las festividades, con actividades dedicadas a San José que combinaron actos litúrgicos y expresiones culturales propias del municipio, reforzando el sentido de identidad y tradición entre los habitantes.

De esta manera, con la pólvora, los fuegos artificiales y el desfile final, Quezaltepeque puso punto final a sus fiestas patronales 2025, una celebración marcada por la alegría, la tradición y, en esta ocasión, por un elevado número de atenciones médicas que dejó en evidencia la necesidad de reforzar las medidas de prevención en este tipo de eventos.