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Ya llovió, se nos olvidó la sequía

Me sorprende es que desde muchos años atrás nunca hemos realizado un amplio programa de almacenamiento de aguas lluvias, llámense embalses, lagunetas o abrevaderos.

Por Manuel Mauricio Martínez |

No me sorprende la reciente sequía, pues año con año venimos pasando similar situación, lo que ya se hizo tradición.

Lo que sí me sorprende es que desde muchos años atrás nunca hemos realizado un amplio programa de almacenamiento de aguas lluvias, llámense embalses, lagunetas o abrevaderos.

Si nosotros iniciamos un amplio programa para almacenar aguas lluvias ¿qué ganaríamos?:

a) Podríamos trabajar invierno y verano sin sufrir la pena de las tradicionales sequias.

 b) Disminuirían las migraciones. Pues se aumentaría el trabajo en la construcción de los embalses y en la agricultura en general.

 c) Diversificaríamos la producción, pues con el costo del riego pensaríamos en cultivos de mayor demanda y rentabilidad.

d) Aprenderíamos a aprovechar mejor el agua mediante el riego de goteo. Y otros.

e) Generaríamos más trabajo y se incrementarían los salarios al tener cultivos más rentables.

f) Podríamos aprovechar mejor la ayuda internacional, tanto en jipoyo técnico como en lo económico. Para una obra prioritaria.

 g) Disminuiríamos la importación de muchos alimentos.

 h) Al haber mayor producción dinamizaríamos el comercio, la industria, en fin toda la parte económica.

 i) Al tener agua tendrían más confianza las empresas que dan crédito.

 j) Dado que los -agricultores actuales en un 60% es gente mayor y a los jóvenes les interesa poco la agricultura. Teniendo agricultura intensiva y más rentable pueda que les sea má~ atractiva.

k) Con una nueva generación de agricultores, es factible que éstos tengan más conciencia sobre la importancia de la conservación de los suelos y se disminuya la galopante erosión.

 Durante cientos de artículos que escribí en los diarios del país, siempre abordé el tema de aprovechar el agua de lluvia que nos cae a razón de 1,800 mm anuales. En cierta ocasión planteé un programa de 80 - 20. Para el agricultor que deseara almacenar agua. Sugiriendo que la parte oficial aportaría 80% y el interesado 20%.

 Como la mayoría diría que no contarían con dinero para su aporte del 20%, sugerirles que vendan unas parcelas para su aporte. En el entendido que el resto del terreno contando con agua se valoraría más. Para el 80% oficial pienso que muchos gobiernos amigos nos apoyarían en este tema prioritario.

Me impresiona hoy en día ver a los ganaderos acarreando zacate y otros materiales para alimentar sus hatos, sin importarles el valor de: su tiempo, costo de los fletes, pago de trabajadores, insumos, etc. Sin pensar que los compradores de leche que una vez llega mayo bajan el precio aunque no haya llovido una gota.

Una vez tengamos agua será indispensable un programa de apoyo para enseñar el uso eficiente de este precioso e indispensable recurso: el agua.

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