La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) apunta en un informe difundido recientemente que El Salvador muestra una “trayectoria insostenible” de la deuda pública.
En el documento en el que se analiza la sostenibilidad de la deuda pública en los países de América Latina y el Caribe para el período 2022-2027 establece que para el caso de El Salvador “todos los escenarios muestran una tendencia creciente en el nivel de deuda pública debido, principalmente, a la mayor tasa de interés real, lo cual evidencia una trayectoria insostenible”.
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La información plasmada en el informe está basada en cifras de la Cepal y del Fondo Monetario Internacional (FMI). Plantea que en América Central, la mayoría de los escenarios muestran una deuda con “tendencia insostenible” en El Salvador y Belice, “con lo cual sería necesario mejores resultados primarios en un contexto de altas tasas de interés”.
El documento de la Cepal cita al FMI, quien señaló en 2022 que “existen mayores presiones para financiar el presupuesto debido al incremento de los márgenes de riesgo de los bonos soberanos y la adquisición de deuda a una tasa mayor con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE)”.
Los escenarios de la deuda
De acuerdo a la Cepal, en un escenario base, la deuda pública de El Salvador se incrementaría hasta 94.4% del PIB en el 2027 que representa un aumento de 5.2 % del PIB respecto al nivel registrado en el 2020.
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En el primer escenario, la relación de la deuda sobre el PIB ascendería a un 103.0% hacia el fin del periodo de análisis dada la tasa de interés real de 6.1%, equivalente al promedio registrado en 2015-2019. “El choque positivo en el crecimiento (segundo escenario) implicaría que la deuda pública alcance un 96.7% del PIB en el 2027”, indica.
También plantea que en el tercer y cuarto escenarios muestran resultados de un 109.3% del PIB y un 109% del PIB respectivamente, mientras que un choque negativo en la tasa de interés y en la tasa de crecimiento del PIB (quinto escenario) llevarían la relación de la deuda pública a un nivel de un 115.6% del PIB.