La Fiscalía General de la República (FGR) solicitó revocar la sentencia contra dos de los imputados por el feminicidio de Melvi Fernanda Nájera, según consta en un documento presentado ante la Cámara Especializada para las Mujeres, de San Salvador.
El 13 de diciembre de 2022, el Juzgado Especializado de Sentencia para una vida libre de violencia y discriminación, de Santa Ana, condenó a Jacqueline Alejandra Martínez Herrera, quien era novia del principal sospechoso, por ser cómplice en el feminicidio, cometido hace cuatro años.
Pero, a la condenada no le fue aplicada ninguna pena, debido a que había una relación afectiva entre el perpetrador del delito y ella, como encubridora, señaló el juzgado.
El artículo 308 del Código Penal establece que no se aplicará la pena a las personas que tienen una relación familiar o de convivencia con la persona investigada por el cometimiento de un delito.
Sin embargo, la FGR considera que durante el proceso no se demostró que la relación entre Martínez Herrera y Michael Alejandro Castillo Murga tuviera características de una relación de convivencia o conyugal, por lo que no se le puede aplicar la excepción contemplada en el artículo 308.
En el mismo juicio, el médico Roberto Arturo Valdivieso López, fue absuelto por el delito de encubrimiento.
La representación fiscal, alega en el recurso de apelación presentado ante la Cámara de San Salvador que durante el juicio, el juzgador no valoró de forma integral la prueba de carácter decisivo que demostraba la participación en el hecho delictivo del acusado.
Inicialmente la FGR acusó a cinco personas por el feminicidio de Fernanda, pero solamente sigue el proceso judicial en contra de Castillo Murga, quien se encuentra prófugo.
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El crimen
El 31 de enero de 2019, Melvi Fernanda y su hijo, entonces de un año siete meses, fueron sacados con mentiras de su vivienda por Castillo Murga, padre del niño.
El 2 de febrero, el cadáver de una mujer, con signos de tortura, fue encontrado en una cuneta en la carretera que conecta el municipio de Ataco con Ahuachapán. Se trataba de Fernanda, pero fue levantado como desconocido.
Un día después, su hijo fue localizado abandonado en medio de un cafetal en el municipio de Ataco. Agricultores alertaron a la Policía que habían encontrado al menor desorientado y deshidratado.
El niño estaba moribundo y picado por los insectos, lo que le dejó secuelas psicológicas y físicas, según ha relatado la madre de Fernanda, quien ha quedado al cuidado del niño.