Alejandra Muñoz ya no halla qué mentiras inventar para tranquilizar a su hijo, que pronto cumplirá 5 años, y que día a día pregunta por su padre, Andrés Felipe Castañeda González, encarcelado en El Salvador bajo el régimen de excepción.
Video / EDH
El colombiano, de 31 años, está detenido en el penal de Jucuapa, departamento de Usulután. En esa condición está desde el pasado 7 de diciembre, cuando fue detenido por policías que llegaron a capturarlo mientras se desayunaba y hacia una vídeollamada con Alejandra.
La mujer cuenta que aproximadamente a las 9:00 a.m. (hora de Colombia) estaba en comunicación con su compañero de vida cuando de repente la conversación sufrió un giro inesperado: de repente varios agentes policiales se le acercaron a Andrés Felipe, que en ese momento desayunaba en un restaurante, supuestamente de la zona de Soyapango.
Andrés Felipe ya le había contado a su mujer que los registros o cacheos eran cosa de rutina en El Salvador. “Yo sabía que lo registraban tres o cuatro veces, pero como él andaba todos sus documentos en regla, no pasaba nada”, contó Alejandra a El Diario de Hoy.
Sin embargo, aquel 7 de diciembre, lo último que escuchó fue cuando los policías le dijeron a Andrés Felipe que sería detenido por agrupaciones ilícitas, bajo el régimen de excepción. Eso fue lo último que escuchó. Luego el teléfono se quedó en silencio y desde entonces no sabe nada de él.
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“No sé si está vivo, si está muerto, si está sano o si está enfermo”, dice Alejandra. La única información de que dispone para saber algo del proceso judicial a través de las autoridades consulares de su país en El Salvador.
Dos colombianos que fueron liberados por el régimen a cambio de que uno de ellos grabara un vídeo en el que decía que no había sido detenido bajo el régimen, le dijeron que habían compartido celda con Andrés Felipe y que estaba bien.
Sin embargo, Alejandra dice no confiar en eso. “Ellos me dijeron que estuvo enfermo pero que ya estaba bien, pero no confío, ellos podrían haberme dicho eso para consolarme”, indicó la joven.
El único regalo...
Alejandra asegura que el más afectado con la ausencia de Andrés Felipe, es el hijo de ambos, que el próximo 17 de julio cumplirá 5 años. El niño le ha dicho que el único regalo que quiere es volver a ver a su padre por quien pregunta a cada momento y el tiempo transcurrido sin verlo le ha hecho pensar que “su papá ya no lo ama porque ya no le llama”, según escuchó que comentaba a una amiga.
“Yo no hallo qué mentiras inventar para tranquilizarlo”, comentró Alejandra, quien quisiera que las autoridades salvadoreñas revisaran el caso lo más pronto posible.
“Él nunca ha tenido problemas con la justicia; tenemos documentos de que nunca ha estado preso. Él es una persona trabajadora”, afirmó la mujer.
A invertir en Bitcoin o a trabajar
Andrés Felipe recaló en El Salvador atraído por las cosas bonitas que en el exterior se oyen: el país más seguro del mundo, un plan económico que sorprendería al mundo, etc.
”Se fue a buscar mejores oportunidades económicas. Fue porque las cosas que mostraban en las noticias eran muy buenas, de que era el país más seguro del mundo en esos momentos y de que ya no habían pandillas“, detalla Alejandra.
La intención del joven colombiano era venir a sondear la posibilidad de invertir en Bitcoin o conseguir algún trabajo. “Él estaba buscando si le resultaba algo, si podía invertir en lo del bitcoin pero no tenía mayor sentido en eso. Él dijo, voy a allá a ver si de pronto entiendo eso más, me explican mejor y puedo invertir allí o puedo conseguir un trabajo”, detalló la joven.
Pero las cosas no salieron como Andrés Felipe esperaba y ahora lleva más de seis meses encarcelado, a la espera de que le hagan la audiencia preliminar, sin embargo, según Alejandra, le han informado que su compañero de vida podría podría pasar seis meses más en prisión.