Sobre las 3:55 de la tarde, hora del este estadounidense (20.55 horas GMT) el Perseverance llegó a Marte y envió las primeras imágenes desde ese planeta. El vehículo de seis ruedas descendió tras superar lo que los científicos de la agencia espacial NASA llaman “siete minutos de peligro”, tiempo en el que el Perseverance hizo su entrada, descenso y aterrizó en suelo marciano.
El Perseverance ingresó a la atmósfera de Marte a una velocidad de más de 12,000 millas por hora (más de 19,000 km/h) y redujo la velocidad en esos 7 minutos para descender con éxito, minutos en los que el “rover” se separó de la nave que lo transportó y desplegó un “paracaídas supersónico”.
Luego de hacer un trayecto de más de 291 millones de millas (468 millones de kilómetros), el rover, de 6 ruedas, cerca 3 metros de largo y de 2,260 libras (1,025 kilogramos), buscará en Marte señales de vida microbiana pasada y recolectará muestras selectas de rocas y sedimentos para su envío futuro a la Tierra.
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El despegue inició el jueves 30 de julio de 2020, a las 7:50 a.m., hora de Florida, EE. UU. cuando la Administración Nacional de la Aeronaútica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) volvió a hacer historia con el lanzamiento de la Misión del Perseverance a Marte y el compatriota Óscar Roberto Paniagua Morales estuvo ahí, en primera línea como parte crucial de ello. En aquel entonces, el joven habló con El Diario de Hoy.
Nervioso y casi a punto de llorar, como él mismo cuenta, vio cómo en cuestión de segundos, minutos, el fruto de cuatro años de trabajo intenso, la nave que lleva el robot rover Perseverance, se dirigió imponente al espacio rumbo al también llamado planeta rojo, con éxito.
Paniagua Morales, originario de San Salvador, forma parte del equipo de la NASA y funge ahí como ingeniero de control de calidad. Como parte de su trabajo tiene que ver con todas las partes de las naves, está presente en el cuarto de ensamblaje y durante la pruebas, para validar que todo esté funcionando, que todo va a funcionar.
“Mi trabajo es asegurarme de que los ingenieros y los técnicos y todos los científicos están haciendo los procesos indicados, que los están siguiendo al pie de la letra. Tengo que revisar los procedimientos que usamos para ensamblar o para hacer pruebas y básicamente asegurarme de que todo está bien y va a salir bien”, precisó.