Parroquia Santa Lucía en Suchitoto: joya arquitectónica colonial
La parroquia de Santa Lucía es uno de los templos coloniales más emblemáticos de El Salvador y un símbolo histórico en el corazón de Suchitoto.
Por
Marcella Palacios
Publicado el 09 de octubre de 2025
La parroquia Santa Lucía, ubicada en el centro histórico de Suchitoto, es uno de los templos coloniales más representativos de El Salvador. Declarada Monumento Nacional en 1978, destaca por su imponente fachada con seis columnas jónicas, torres con cupulinos y un reloj central. Su estructura de adobe, calicanto y teja de barro alberga una planta basilical con tres naves, capillas laterales y un piso de mosaicos coloridos. Más allá de su función religiosa, este templo es un referente arquitectónico y cultural que forma parte esencial del paisaje urbano de Suchitoto, atrayendo visitantes durante todo el año por su historia y diseño.
En medio del empedrado y el ambiente apacible de Suchitoto se alza la parroquia de Santa Lucía, una de las construcciones más representativas de la arquitectura religiosa colonial en El Salvador. Ubicada en el centro del municipio, esta iglesia no solo resalta por su valor espiritual, sino también por su impresionante diseño arquitectónico y su importancia histórica como referente cultural del país.
Considerada el edificio de mayor presencia ornamental en Suchitoto, la parroquia fue declarada Monumento Nacional por Decreto Legislativo n.º 537 el 25 de mayo de 1978. Este reconocimiento resalta no solo su antigüedad, sino también su relevancia como patrimonio tangible del arte y la fe en el territorio salvadoreño.

Detalles que narran siglos de historia
El templo fue construido sobre una manzana rectangular y presenta una armoniosa mezcla de elementos coloniales y detalles decorativos únicos en el país. Su fachada principal se compone de un pórtico hexástilo, es decir, seis columnas jónicas que sostienen un entablamento y, sobre este, una pequeña terraza resguardada por una delicada rejilla. A continuación, se levanta la pared frontal con tres accesos en la parte inferior, todos enmarcados con dobles arcos de medio punto. El central se destaca por su mayor énfasis visual.

La parte superior de la fachada ofrece tres nichos separados por pilastras delgadas y culmina en un frontón triangular con un reloj central, coronado por una torre campanario cubierta con un pequeño cupulino y una cruz en la clave. A ambos lados del frontón se levantan dos torres: la del norte resguarda un vibráfono y la del sur funciona como campanario. Ambas están rematadas por cúpulas que armonizan con el diseño general del templo.
Arquitectura viva: materiales y simbología
La parroquia de Santa Lucía fue edificada con muros de adobe, mientras que la fachada principal y las cúpulas están hechas con calicanto, una técnica tradicional que combina cal y canto rodado. Su cubierta de teja de barro es sostenida por armaduras de madera a dos aguas, salvo en las capillas laterales, las cuales presentan bóvedas semiesféricas (de media naranja) con cupulinos o linternillas.

En el costado norte del templo, uno de los accesos laterales conserva una inscripción con la fecha de 1859, lo que ofrece una pista del proceso constructivo a lo largo de los años.
Te puede interesar: ¿Qué historia puede contar un plato? Descubrilo en el Museo de los 1,000 Platos en Suchitoto
En su interior, la iglesia cuenta con una planta basilical rectangular de 68 metros de largo por 24 metros de ancho, y una altura de 29 metros en su fachada principal. El espacio se divide en tres naves, siendo la central más amplia que las laterales. Estas están separadas por arcos sostenidos por columnas circulares de madera asentadas sobre bases de piedra.
El suelo, cubierto de mosaicos de colores y figuras geométricas, añade un componente visual que contrasta con la sobriedad de sus muros. Asimismo, el templo cuenta con dos capillas anexas dispuestas perpendicularmente a las naves: la más grande está dedicada al Sagrado Corazón y se ubica al sur; la menor, al Señor de las Misericordias, se encuentra al norte.

Cómo llegar y qué más explorar
Suchitoto se encuentra a unos 47 kilómetros de San Salvador y es fácilmente accesible en vehículo particular o en bus desde la Terminal de Oriente. La parroquia está ubicada frente al parque central, en pleno corazón de la ciudad, lo que la convierte en punto de partida ideal para explorar el resto del municipio.
Quienes visitan el templo pueden aprovechar para conocer otros atractivos como el lago Suchitlán, la Casa Museo de Alejandro Coto, Museo de los 1,000 Platos y Mas y Museo de la Moneda.
La entrada a la iglesia es gratuita y generalmente está abierta al público todos los días, especialmente durante horarios de misa y actividades religiosas. No obstante, se recomienda visitar por la mañana para aprovechar mejor la luz natural y evitar aglomeraciones, especialmente los fines de semana.
TAGS: Arte | Cultura | Santa Lucía | Suchitoto
CATEGORIA: Entretenimiento | Arte y cultura
