El Salvador fortalece su atractivo exportador con nuevo acuerdo comercial con EE. UU.

Un acuerdo de comercio recíproco con Estados Unidos promete impulsar exportaciones, atraer inversión extranjera y consolidar la confianza en el clima de negocios salvadoreño.

El reciente anuncio de un acuerdo de comercio recíproco entre El Salvador y Estados Unidos ha sido recibido con entusiasmo por las principales gremiales empresariales del país. Este entendimiento, que elimina tarifas aduaneras para exportaciones salvadoreñas bajo ciertas regulaciones, representa una nueva etapa de oportunidades para el sector productivo.

La Corporación de Exportadores de El Salvador (Coexport) destacó que el acuerdo restablece condiciones de competencia y certidumbre. Silvia Cuéllar, presidenta de la gremial, explicó que la eliminación de aranceles adicionales, como el 10 % aplicado a ciertos productos bajo el CAFTA-DR, permitirá mejorar la competitividad internacional de las exportaciones nacionales. “Con este acuerdo se abren nuevas posibilidades para sectores clave como el textil, donde El Salvador podrá ofrecer productos con cero aranceles, algo que no todos los países de la región tendrán”, dijo Cuéllar.

Sectores estratégicos se benefician directamente

Una de las industrias más favorecidas es la textil y de confección. La Cámara de la Industria Textil, Confección y Zonas Francas (Camtex) señaló que este avance comercial es resultado de una estrategia de diplomacia económica efectiva liderada por el presidente Nayib Bukele. Destacaron que el acceso preferencial al mercado estadounidense fortalecerá la cadena de valor y facilitará nuevas inversiones en zonas francas y plantas de manufactura.

Confianza, empleo y proyecciones de crecimiento

Tanto la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI) como la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (Camarasal) coincidieron en que este acuerdo genera un entorno más propicio para atraer inversión extranjera directa (IED). Al reducir la incertidumbre comercial y mejorar las condiciones de acceso al principal socio comercial de El Salvador, se espera un efecto positivo en la generación de empleo, divisas y dinamismo económico.

“Este tipo de acuerdos envía una señal clara a los mercados internacionales: El Salvador está abierto a los negocios y comprometido con el crecimiento sostenible”, afirmó un portavoz de la ASI.

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En términos prácticos, la exoneración de aranceles podría traducirse en un aumento del volumen exportado, especialmente en rubros donde los costos aduaneros eran una barrera significativa. Asimismo, inversionistas potenciales podrán reevaluar a El Salvador como una plataforma de producción regional con acceso preferencial al mercado estadounidense.

Este acuerdo comercial consolida una relación histórica con Estados Unidos y abre una ventana de oportunidad para que el país acelere su ritmo exportador, promueva la creación de empleo formal y posicione su marca-país en un entorno global cada vez más competitivo.