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PERFIL: Marcelo Arévalo, de Sonsonate hasta el cielo de París

El largo camino del tenista cuscatleco, el primer centroamericano en ganar en un Grand Slam. La historia de sus orígenes y cómo siguió y superó los pasos de su hermano

Por César Najarro / Twitter: @cjnajarro |

Marcelo Arévalo es el primer tenista salvadoreño en ganar un título en Roland Garros, conquista que logró junto al holandés Jean-Julien Rojer en dobles masculinos. Video de carácter no comercial: https://twitter.com/rolandgarros/status/1533157550040006657?s=21&t=FQoMMy8xeTA2r_i-ZLoFeg.

Marcelo Arévalo, “Chelo” para sus amigos y en el mundo del tenis, “Animal” para su compañero de parejas Jean Julien Rojer cuando mete esa derecha poderosa en las esquinas, está orgulloso a más no poder, no sólo porque acaba de ganar el Roland Garros, no sólo por convertirse en el primer salvadoreño, y el primer centroamericano en llegar tan alto en el tenis mundial, sino por sus orígenes.

Marcelo Arévalo se convirtió en el primer salvadoreño en llevarse el título en el torneo Roland Garros. Vive los momentos las mejores jugadas y de cómo celebró. Video de carácter no comercial tomados de: https://twitter.com/rolandgarros.

Siempre, aun cuando solo jugaba torneos future y la Copa Davis representando al país, tenía en mente que quería ser un modelo, un referente deportivo nacional, para demostrar que, de un pedacito de tierra, donde brotan problemas, también surgen personas que se salen de la norma, que se codean contra los mejores del planeta. Esta es su historia:

El origen

Marcelo nació un 17 de octubre de 1990 en Sonsonate, y comenzó a jugar al tenis cuando tenía unos 7, 8 años, simplemente porque sus padres también lo practicaban, de manera amateur, social, con sus amigos. Su hermana mayor, también lo practicó un poco, pero fue Rafael, el segundo hijo, el que comenzó a despuntar, hasta llegar a ser el octavo del mundo en juniors. Además, representó al país en los Juegos Olímpicos de Pekín, a donde cayó en segunda ronda contra Roger Federer.

Marcelo Arévalo, de joven. Foto EDH/ Archivo

Marcelo, en cambio, disfrutaba de un tenis más bien de recreación, viajaba con su hermano y sus padres a la capital para entrenar dos veces por semana en el polideportivo de Ciudad Merliot, sin siquiera imaginar que un día sería campeón mundial.

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Cuando sus progenitores vieron que destacaban – para entonces, sobre todo Rafael -, comenzaron a llevarlos tres días a entrenos, y así fue creciendo todo.

El salvadoreño Marceo Arévalo reacciona junto al holandés Jean-Julien Rojer tras ganar el trofeo de dobles masculinos en Roland Garros. Foto / AFP

Rafael primero, y Marcelo después, representaron al país en diversos torneos junior, en campeonatos nacionales pronto fueron los más destacados en sus categorías, y se convirtieron y siguen siéndolo hoy (Rafael ya está retirado) en los máximos exponentes del tenis del país con todos los récords de representación en Copa Davis (el mundial de tenis por naciones).

Todo cambió para bien cuando Chelo se sumó al programa de estudios del Indes, una especie de internado con lo que pudo pasar a entrenar todos los días en el polideportivo, a donde recibía sus clases a distancia. Así sacó el bachillerato.

Marcelo Arévalo (Izq) sostiene una bandera de El Salvador junto a Jean-Julien Rojer. Foto: AFP

Hacia el norte

Sus buenos resultados y el apoyo familiar, siempre fundamental (en cada torneo se veía en las gradas gritando a sus padres), le valieron para ganarse una beca en la universidad de Tulsa, Estados Unidos. Sin embargo, pronto se retiró y tomó la decisión de volverse profesional del tenis.

Con esfuerzo familiar, se asentó en Miami, a donde comenzó a entrenar de otra manera. Paralelamente, siguió representando al país en Juegos Centroamericanos, y en Copa Davis, a donde, eventualmente, se convirtió en la primera raqueta nacional, además de disputar siempre el dobles con su hermano Rafael. Ascendieron al país a la zona dos de las Américas, y Chelo comenzó a despuntar como profesional.

Ganó 5 torneos Future (los de nivel más bajo entre profesionales), 3 Challenger y pronto descubrió que, en el dobles, tenía, quizás, un mejor futuro.

Llegó a ser el 139 del planeta en singles en julio de 2018, pero ya tenía en mente ir apostando más por el dobles. Y la apuesta fue ganadora. Con una racha exponencial importante, pasó a enriquecer su palmarés hasta llegar a 18 títulos Challenger de dobles.

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En 2018, además, logró su primer título ATP, el de Los Cabos, de aún mayor jerarquía, junto con el mexicano Miguel Ángel Reyes. Su desempeño le permitió seguir escalando posiciones en el ranking mundial e ir mejorando el récord para cualquier salvadoreño en cuanto a clasificación mundial, lo que también le valía para poder optar a mejores torneos, a mejores premios y también a poder ganar más experiencia al enfrentar a rivales más fuertes. También, podía ir juntándose con atletas con una mejor posición mundial.

Fue así como en 2021 hizo parea con el neerlandés Matwé Middelkoop, con quien lograron el título ATP de Wiston-Salem. Ese mismo año, además, incursionó en el dobles mixto a altos niveles, con Giuliana Olmos, de México, con quien llegaron a la final del US Open.

Ese mismo año, volvió a encontrarse a un viejo conocido, un tal Jean Julien Rojer, de Países Bajos, y dos veces campeón en el pasado de Grand Slams en dobles, uno en 2017 (US Open), y otro en Wimbledon, en 2015.

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Como vivían cerca en Miami, a unos 40 minutos, eventualmente decidieron entrenar juntos. Para entonces, ambos estaban sin pareja para disputar torneos de dobles, y Arévalo ya estaba entre los mejores 50 del mundo, igual que Rojer.

Lo demás, es historia. Arévalo y Rojer ganaron en Dallas otro torneo ATP, y luego en el de Delray Beach, ambos en Estados Unidos, hasta coronarse en el cielo de París con el título de los mosqueteros, el primer grande para Chelo, que se lo dedicó a su esposa y al país, a sus padres y a su hijo, y el tercero para Rojer, quien también se lo ofreció a su pareja y familia.

Perfil:

Nombre: Marcelo Arévalo

Data: 17 de octubre de 1990, Sonsonate

Edad: 31 años

Estado Civil: Casado con Lucia Kovarcikova, eslovaca, desde 2020

Hijo: Marcelo Arévalo Jr.

Deporte: Tenis

Debut profesional: 2012

Estatura: 193 centímetros

Peso: 190 libras aprox.

Mano: Derecha

Revés: A dos manos

Entrenadores: Yari Bernardo y Carlos Teixeira

Trayectoria: Inició en el tenis a mediados de los años 90, tras seguir los pasos de sus padres, quienes lo practicaron de manera amateur con sus amigos.

Selección: Ha representado a El Salvador en distintos eventos . En la Copa Davis, es un habitual desde 2005 a la fecha. Solo no estuvo en 2006. también ha participado con la bandera nacional en Juegos Centroamericanos y
del Caribe.

Palmarés: Campeón del dobles en Roland Garros (2022). Cuatro títulos ATP en dobles: Los Cabos, México, (2018), junto con Miguel Ángel Reyes (MEX); Wiston-Salem, Estados Unidos (2021), con Matwé Middelkoop; Dallas, EE.UU. (2022) y Delray Beach, ambos con Jean Julien Rojer. Además, 21 títulos Challenger (3 de ellos individuales), y cinco Futures.

Premio especial: Ganó la Espiga Dorada en 2018.

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