5-2. Un magistral Atlético pasa por encima del Real Madrid

El Atlético de Madrid sacó carácter, orgullo y fútbol para tumbar al líder Real Madrid en un derbi que quedará en la memoria de los aficionados rojiblancos. Con Julián Álvarez como figura estelar, autor de un doblete, y el aporte decisivo de Sorloth y Griezmann, el cuadro de Diego Simeone goleó 5-2 al eterno rival en el Metropolitano, devolviendo la ilusión a una afición que reclamaba un golpe de autoridad en el inicio del curso.

Un inicio eléctrico y con sorpresas en los onces

El partido arrancó con intensidad máxima. Xabi Alonso sorprendió con Jude Bellingham y Guler en su once titular, mientras que Simeone apostó por Alexander Sorloth en el ataque pese a las críticas. Desde los primeros minutos se vio un Atlético superior en agresividad y en ritmo de juego. La presión alta y las rápidas transiciones desconcertaron al Madrid, que apenas podía salir de su propio campo.

El primer gol llegó con justicia: Giuliano centró con precisión y Le Normand conectó un cabezazo inatajable para batir a Courtois. La alegría colchonera, sin embargo, duró poco. Mbappé apareció para igualar tras un despiste defensivo, y más tarde Guler puso el 1-2 con un remate dentro del área, castigando los errores rojiblancos.

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Sorloth y Álvarez cambian la historia

Cuando parecía que el golpe anímico pesaba demasiado, el Atlético reaccionó con valentía. Koke se convirtió en el motor del mediocampo y Barrios aportó sacrificio y equilibrio. En ese contexto, apareció Sorloth para reivindicarse con un cabezazo que significó el 2-2 y que liberó al delantero noruego tras semanas de críticas.

El empate al descanso dejó abierta la segunda mitad, pero con la sensación de que el Atlético tenía más hambre que su rival. Y así fue. Apenas iniciado el complemento, Nico recibió una falta dentro del área y el árbitro señaló penalti. Julián Álvarez tomó la responsabilidad y con un zurdazo certero marcó el 3-2, desatando la euforia en el Metropolitano.

La noche mágica de Julián

El argentino, que ya había salvado a su equipo días atrás frente al Rayo Vallecano, volvió a vestirse de héroe en el partido más importante. Minutos después de su penalti, se encargó de ejecutar un tiro libre desde la frontal que terminó en golazo, imposible para Courtois. Era el 4-2 y el momento en que el Atlético terminó de inclinar el clásico a su favor.

El Real Madrid, desconcertado, buscó respuestas con cambios ofensivos como Camavinga y Mastantuono, pero no encontró profundidad. La defensa colchonera se mantuvo firme y Oblak respondió cuando fue exigido. Con el rival desdibujado, el Atlético aprovechó para cerrar la goleada con un tanto de Griezmann en los minutos finales, sellando el histórico 5-2.

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Un triunfo que cambia el rumbo

El Atlético necesitaba un resultado así. Después de un arranque de temporada irregular y con dudas en torno al rendimiento, el equipo de Simeone respondió en el momento clave y frente al adversario más exigente. Julián Álvarez emergió como figura absoluta, sumando dos goles que lo consolidan como uno de los jugadores más determinantes del campeonato.

Para el Real Madrid, la derrota supone un aviso serio. A pesar del talento de su plantilla, quedó expuesto en defensa y falto de reacción ante un rival que jugó con más convicción. Xabi Alonso deberá trabajar en ajustar piezas para evitar que esta derrota pese en la pelea por LaLiga.

El Metropolitano fue testigo de una noche que los hinchas colchoneros recordarán por años: la del día en que su equipo, con fútbol y coraje, goleó al Real Madrid y se colocó de lleno en la disputa por el título.