Alimentos ultraprocesados elevarían el riesgo de cáncer de colon en jóvenes

El consumo habitual de alimentos ultraprocesados podría estar relacionado con el aumento de lesiones precancerosas que anteceden al cáncer de colon en adultos menores de 50 años, según una investigación publicada en la revista JAMA Oncology y divulgada por la agencia EFE.

El estudio señala que estos productos representan cerca del 70 por ciento de la oferta alimentaria en Estados Unidos y que su presencia creciente en la dieta moderna coincide con un incremento de diagnósticos tempranos de esta enfermedad.

Un estudio que siguió a más de 29,000 mujeres durante 24 años

La investigación analizó durante 24 años a más de 29,100 enfermeras estadounidenses, entre 1991 y 2015. De acuerdo con la información detallada por EFE, las participantes que consumían alrededor de diez raciones diarias de alimentos ultraprocesados mostraron un 45 por ciento más de riesgo de desarrollar crecimientos precancerígenos antes de los 50 años, frente a quienes mantenían una ingesta baja.

Estos crecimientos, conocidos como adenomas colorrectales, no son cáncer en sí mismos, pero sí representan un indicador relevante del riesgo futuro. Tras la difusión de los resultados, el autor principal del estudio, el doctor Andrew Chan, explicó en declaraciones recogidas por la cadena CNN que “las conclusiones no establecen una relación de causa y efecto”, aunque subrayó que los hallazgos “ofrecen pistas importantes sobre cómo la alimentación puede influir significativamente en la salud del colon”.

El especialista agregó además que los resultados son consistentes con la preocupación creciente sobre los patrones alimentarios actuales. “Estamos observando cambios significativos en la dieta de las personas jóvenes, y eso podría estar desempeñando un papel en la aparición temprana de enfermedades que antes veíamos a edades más avanzadas”, señaló Chan.

Qué alimentos predominaron en la dieta observada

Según la información facilitada por EFE, los alimentos ultraprocesados más frecuentes en las dietas analizadas fueron panes industriales, cereales para el desayuno, salsas preparadas, cremas untables y bebidas azucaradas o edulcoradas artificialmente. Este tipo de productos son conocidos por su contenido elevado de calorías, sodio y aditivos diseñados para aumentar sabor, textura o vida útil.

Los investigadores destacan que la expansión de estos alimentos responde en gran medida a su practicidad, su bajo costo y su disponibilidad en todo tipo de entornos urbanos. Sin embargo, esta presencia masiva en la alimentación cotidiana podría tener efectos nocivos que aún se están evaluando. Otros estudios mencionados por la agencia EFE también han vinculado el consumo frecuente de ultraprocesados con un mayor riesgo de depresión, diabetes tipo 2 y muerte prematura, lo que refuerza la necesidad de analizar sus repercusiones a largo plazo.

Además, los científicos remarcaron que estos productos suelen desplazar el consumo de alimentos frescos o mínimamente procesados, reduciendo la ingesta de fibra, vitaminas y compuestos esenciales para la salud digestiva. “La calidad de lo que comemos importa más de lo que muchas veces reconocemos”, afirmó Chan en sus declaraciones. “Nuestros resultados indican que mirar más allá de las calorías y observar el nivel de procesamiento puede ser fundamental”.

Un vínculo aún no definitivo, pero cada vez más investigado

A pesar de que los datos apuntan a una asociación clara entre ultraprocesados y lesiones precancerosas, los autores del estudio insisten en la necesidad de cautela. Al tratarse de una investigación observacional, no permite determinar una causalidad directa. Chan recalcó que estos hallazgos “deben verse como una pieza más del rompecabezas”, ya que otros factores como la genética, la actividad física o el tabaquismo también influyen en el riesgo de cáncer colorrectal.

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Otra limitación señalada es que la población evaluada estuvo compuesta únicamente por mujeres estadounidenses, lo que plantea la necesidad de ampliar los análisis a otros grupos demográficos. Aun así, los investigadores subrayan que la dimensión del estudio, su duración y la consistencia de los resultados aportan evidencia sólida para continuar profundizando en este tema.

Un llamado a reflexionar sobre la dieta moderna

El aumento global de diagnósticos de cáncer colorrectal en adultos jóvenes ha despertado inquietud en la comunidad médica, y esta investigación suma un elemento clave para entender la posible influencia del estilo de vida contemporáneo. Reducir el consumo de ultraprocesados y privilegiar alimentos frescos o mínimamente procesados aparece como una recomendación razonable para disminuir factores de riesgo que pueden evitarse.

Aunque los investigadores insisten en que aún no se puede hablar de causalidad, el mensaje es claro: lo que se come tiene un impacto directo en la salud intestinal. Reflexionar sobre los hábitos alimentarios y prestar atención al nivel de procesamiento de los productos podría ser un paso relevante para proteger la salud a largo plazo.