Brasil aprueba acuerdo de cielos abiertos con El Salvador

El Senado Federal de Brasil aprobó el Acuerdo de Cielos Abiertos con El Salvador, permitiendo mayor flexibilidad para las aerolíneas de ambas naciones. Este tratado bilateral, ratificado el 13 de noviembre en una sesión especial, autoriza la libre determinación de capacidad y derechos de tráfico hasta la quinta libertad del aire, lo cual podría facilitar el aumento de vuelos y la creación de nuevas rutas comerciales.

Desde la perspectiva de la Agência Nacional de Aviação Civil (ANAC) de Brasil, el acuerdo representa una oportunidad para fortalecer el turismo, el comercio y los lazos culturales entre ambos países. Durante la ceremonia, Roberto Honorato, superintendente de Aeronavegabilidad, destacó que este tratado "reafirma el papel de la aviación como vector de desarrollo, conectando personas, aproximando mercados y promoviendo integración regional".

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El acuerdo, firmado originalmente en 2022 en Nueva York, fue refrendado por el Senado brasileño mediante el Proyecto de Decreto Legislativo nº 319/2024, bajo la relatoría del senador Marcos Pontes. Su ratificación coincide con la conmemoración de los 119 años de relaciones diplomáticas entre ambos países.

Más rutas, más conexiones: lo que podrían aprovechar las aerolíneas

La implementación de este acuerdo habilita a las aerolíneas de Brasil y El Salvador a operar rutas con mayor autonomía, incluyendo la posibilidad de realizar escalas en terceros países sin restricciones comerciales. Además, establece un marco técnico que reconoce mutuamente certificados de aeronavegabilidad, licencias, normas de seguridad y tarifas, conforme a los 26 artículos del tratado consolidado.

Aunque aún no se han anunciado nuevas rutas específicas, la aerolínea Avianca podría ser una de las principales beneficiadas, dada su operación desde el hub en San Salvador hacia múltiples destinos en Norteamérica, Centroamérica y Sudamérica. Este escenario plantea una posible expansión de frecuencias o itinerarios, si bien dependerá de decisiones comerciales y de conectividad estratégica por parte de las aerolíneas involucradas.

Los fundamentos de este acuerdo se remontan a 2019, cuando se firmó un memorando de entendimiento durante la 40ª Asamblea de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) en Montreal. Desde entonces, ambas naciones han avanzado hacia un modelo de cielos abiertos que incluye el uso extendido de códigos compartidos y un cuadro de rutas flexible.