Sobre la inseguridad vial

Este martes, observando el carro que va adelante a 70 km/h, me dice mi acompañante: ¡Ese carro va un poco torcido! Es cierto, el eje longitudinal del carro no coincide con el de la carretera y va desalineado unos tres grados. 

¿Qué sucedería si de pronto empieza a llover y con la carretera lisa por la capa de aceite y agua sobre el asfalto, el conductor tiene que frenar bruscamente? Sencillo… Por su propia inercia el carro, se girará hacia un lado, se atravesará, colisionará con otros o se saldrá de la carretera. Si el ángel de la guarda va despierto, terminará en un susto. Pero, si por la velocidad y la inexperiencia del conductor no reacciona adecuadamente, la cosa puede terminará muy mal. 

Hoy Waze nos va informando sobre el estado del tráfico y la carretera en los siguientes kilómetros y aun así, según el “Observatorio Nacional se Seguridad Vial” -https://observatoriovial.fonat.gob.sv/- del uno de enero al doce de mayo de este año, hubo 7365 Siniestros viales, 4618 lesionados y 430 fallecidos.

¿Y cuáles pueden ser las causas? Posiblemente, la forma agresiva de manejar, las falsas prisas, el estrés por llegar, las distracciones, el mal mantenimiento, el “desajuste de la geometría” del carro, la falta de señalización, el crecimiento del parque vehicular, el alcohol y la irresponsabilidad de los conductores. 

Pero también es cierto que podría haber más accidentes, sin el trabajo de los gestores de tráfico del VMT, la regla de “cero alcohol” (varios días en bartolina por dos cervezas). Las plataformas de UBER y las empresas de taxis, las pruebas antidoping de la policía de tránsito y el temor que genera el estado de excepción.

Por mis años en la industria del automóvil, en Opel en Alemania y en Ford en España, sé que existe en la configuración de las carrocerías, la “Geometría del vehículo”, formada por una serie de puntos de anclaje de las partes móviles cuyas distancias tienen una tolerancia de más/menos un milímetro. Por ejemplo, de las “tijeras y los amortiguadores de las ruedas delanteras”, las tijeras y amortiguadores de las ruedas traseras, las sujeciones de las barras de torsión, los puntos de anclaje del motor y la caja de velocidades, como también, el alineamiento de las ruedas delanteras, que se mide y regula, el “camber”, la inclinación hacia la derecha o a la izquierda. El “Caster”, el ángulo de avance o la inclinación de los amortiguadores y el “ángulo de convergencia y divergencia de las ruedas”. ¿Sabe cómo están los de su carro?

Cuando veo la condición y deformación con la que se continúa permitiendo importar carros chocados de EE.UU., admiro los artistas de la mecánica que los enderezan, los pintan, ponen bonitos y vendibles, pero siempre dudo sobre si en los accidentes que tuvieron esos carros, se movieron los puntos de anclaje que conforman la “geometría del vehículo” y quizás esa sea una más de las razones de tantos accidentes. 

En los sesenta conocí el TÜV en Alemania y en los ochenta el ITV en España, dos entidades autónomas que comprueban cada cierto tiempo, o después de un accidente, que los vehículos estén en condiciones técnicas de funcionamiento. 

Aquí tenemos la Revisión Técnica Vehicular y Emisión de gases del transporte colectivo, que al ver la inmensidad de buses que expulsan grandes chorros de humo negro, no se explica uno como les permiten circular.

Así las cosas, no nos extrañemos de los muchos accidentes, lesionados y fallecidos, y permítame el consejo: Maneje sin prisas y a la defensiva, porque hay muchos incautos que sienten, que las dos ruedas de sus motos o las cuatro de sus carros, los convierten en pilotos de la “Fórmula 1”. 

Y si compra un carro chocado y reparado, que le demuestren que su geometría está como debe estar. 

La seguridad vial ha hacemos entre todos.

 Ingeniero

Todo es más fácil y más sencillo con sentido común