Estos son los graves peligros de orinar en la ducha, según experta

Seguramente estás acostumbrado a orinar en la ducha, sin saber que es realmente peligroso; esto dicen los especialistas

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Foto/ Pexels

Por L. Puente

2021-12-10 4:26:12

Orinar en la ducha, previo a tomar un baño o durante cae el agua de la regadera, es una costumbre muy polémica; hay quienes la consideran normal, mientras que para otros es una práctica poco higiénica.

En este sentido, son muchos los profesionales de la salud que han tocado el tema y las opiniones siguen siendo muy divididas; de hecho algunos califican esta tendencia como poco relevante, afirmando que no tiene ninguna complicación, otros hacen especial énfasis en sus beneficios, como el ahorro de agua, el ahorro de papel higiénico y la posibilidad de evitar infecciones pues la zona íntima se lava de inmediato.

No obstante, pesan más los peligros que los beneficios. De acuerdo con la doctora Alicia Jeffrey-Thomas, fisioterapeuta certificada del piso pélvico de Boston Urology, consultada por varios medios estadounidenses, existen dos peligrosos riesgos  al orinar en la ducha; uno de estos afecta a hombres y mujeres, y otro exclusivamente al género femenino.

Para la experta, según cita la agencia de noticia "Sputnik", dejar que la orina salga cuando se escucha el agua crea una especie de condicionamiento, en el cual el cerebro comenzará a asociar dicho sonido con la necesidad de ir al baño y, en ocasiones extremas, podría generar un caso de incontinencia al lavarse las manos o lavar los platos.

“Cuando combinas eso con la disfunción del piso pélvico, entonces potencialmente conducirá a algunos problemas de fugas de vejiga cuando escuches agua corriendo fuera de la ducha”, aseguró Jeffrey-Thomas, en una entrevista a la referida agencia.

Foto/ Pixabay

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Otra hipótesis de la especialista se basa en que este mismo ruido, generado por el agua que corre, hace que el cerebro logre comunicarse con el esfínter, un anillo muscular encargado de controlar la orina que pasa por la uretra, el cual la cierra y la abre en el momento en el que se desea expulsar; quienes pierden este control son aquellos que sufren de incontinencias.

En cuanto a las mujeres, Thomas asegura que la anatomía pélvica de la mujer no está diseñada para orinar de pie; ya que, a diferencia de los hombres, no cuentan con una próstata que sostiene la vejiga.

"Teniendo en cuenta que en la ducha orinarían en esta posición, podría ser algo muy perjudicial pues el suelo pélvico no podría relajarse lo suficiente para vaciar por completo la vejiga; incluso si se acurrucaran quedarían volúmenes residuales que luego se convertirán en un problema", se lee en la publicación de "Sputnik".

A esto se suma que, existe la posibilidad de que las bacterias de la orina entren en alguna herida abierta en el cuerpo y causen una infección; por lo que, lo recomendable es hacer caso omiso a la necesidad de orinar en la ducha y hacerlo justo al terminar el baño, en un inodoro.