La pupusera más rápida de Olocuilta encendió el Festival de la Pupusa 2025

Desde tempranito, las calles principales se llenaron de color y música con desfiles, reinas y cachiporras, marcando el inicio de una jornada donde el orgullo salvadoreño se saborea en cada pupusa. Familias enteras, turistas y “hermanos lejanos” se reunieron para disfrutar del ambiente y revivir las tradiciones que hacen de Olocuilta un lugar único.

El ambiente es una fiesta total. Mientras caminás por las calles, el olor a pupusa recién hecha te envuelve y te hace detenerte en cada puesto. Las pupuseras, con su delantal y su ritmo imparable, ofrecen pupusas de todo tipo: de frijoles con queso, chicharrón, ayote, jalapeño y, por supuesto, las infaltables pupusas de arroz, orgullo y símbolo de identidad olocuilteca.

Todo acompañado por el curtido, la salsa y esa sonrisa amable que caracteriza al salvadoreño.

Uno de los momentos más esperados del festival es el concurso de la pupusera más rápida, donde participan nueve competidoras, incluyendo a una valiente representante del público. En tres rondas llenas de emoción, las expertas demuestran su habilidad para palmear y voltear pupusas sin perder ni un segundo.

Cada una obtuvo dos minutos para hacer la mayor cantidad posible, con premios de $150 y un celular para el primer lugar, $100 para el segundo y $75 para el tercero.

La competencia estuvo tan complicada que el público no dejó de aplaudir y animar a las participantes. Entre risas, gritos de apoyo y celulares grabando cada momento, la emoción se siente en el aire.

Karen Funes logró preparar 10 pupusas revueltas en dos minutos superando a Jaqueline Ramírez, quien hizo 9 pupusas en el mismo tiempo y el tercer lugar lo obtiene Ingrid Martínez, quien se gana los $75 del premio.

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Entre las concursantes también destacó Fátima Rivera, una participante experta que ya ha competido en varias ediciones del festival.

Con una sonrisa segura, comentó: “Lo que más me motiva es el premio, claro, pero también la emoción de participar. Ya he ganado en años anteriores y esta vez pienso hacer unas doce pupusas si Dios quiere”, dice mientras prepara sus ingredientes con destreza.

El evento contó con la visita de turistas nacionales e internacionales. Este año hay presencia de turistas de Francia y China, quienes se muestran sorprendidos por el ambiente y la calidez de la gente. “Es increíble cómo una comida puede reunir a tanta gente con tanta alegría”, comenta una turista francesa mientras disfruta su primera pupusa de arroz con queso.

El Festival de la Pupusa continúa este domingo con música, bailes típicos y actividades culturales que llenan de vida las calles de Olocuilta. Más que un evento gastronómico, esta celebración reafirma el orgullo de ser salvadoreño y resalta el sabor, la tradición y la unión que caracterizan a la capital de la pupusa de arroz.