El Ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, sostuvo este lunes durante una conferencia de prensa sobre los avances del caso de los hermanos Guerrero Toledo que “no existe un aumento en los desaparecidos, solo es una campaña en contra de autoridades de seguridad, por intereses políticos que no tuvieron nunca el interés de resolver los problemas de seguridad”.
Las declaraciones contrastan con las múltiples denuncias diarias en redes sociales que hacen las familias salvadoreñas en la búsqueda desesperada de sus parientes.
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El ministro de Seguridad también aprovechó la presentación de los detenidos por el caso de los hermanos para culpar a los medios de comunicación por visibilizar la problemática de los desaparecidos y dijo que hay una campaña de desprestigio.
Por su parte, Zaira Navas, abogada de Cristosal, reaccionó ante las declaraciones de Villatoro y le pidió más "respeto" para las víctimas y parientes. "¿Cuál campaña? Datos @FGR_SV: 2020: 683 personas desaparecidas; 13 de octubre 2021: 1192. Las víctimas y sus familias merecen respeto. No hay víctimas buenas o malas, son víctimas. Su deber es investigar, dar con el paradero y determinar a los responsables", recalcó Navas.
En referencia a los casos que son expuestos en redes sociales, el ministro aseguró que “para poder activar todos los protocolos y organismos de búsqueda necesitamos la denuncia en sede fiscal o en sede policial”, señalando que en el caso de los hermanos Guerrero Toledo, y Jimena Ramírez, futbolista desaparecida, las denuncias fueron interpuestas 48 horas después de lo sucedido. Tras la “tardía recepción de la denuncia” se estaban “reduciendo” las posibilidades de encontrarlos con vida, dijo.
Durante la conferencia brindada por las autoridades se presentó a dos presuntos pandilleros involucrados en la desaparición de los hermanos, así como la reconstrucción de los movimientos de los jóvenes. Villatoro señaló que en este caso "hay una relación directa: jóvenes, droga, pandillas".
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El ministro Villatoro recriminó además a los familiares de jóvenes que son reportados como desaparecidos y dijo que los padres deben saber con quien andan sus hijos y si estos consumen o no algún tipo de droga. “Hago un llamado a los padres de familia para que veamos en qué actividades andan nuestros hijos”, declaró.
Por su parte, el fiscal del Gobierno, Rodolfo Delgado, hizo un llamado a los padres para que “reflexionen con sus hijos y que los mantengan alejados de ese tipo de conductas”.
El ministro de Seguridad manifestó que en 2017 “hubo 1,493 casos de desaparecidos, entre 2017 y 2021 tenemos una reducción de más del 60%". "Lo que quiere decir es que no estamos en un escenario como están planteando algunos poderes fácticos”, señaló.
Con relación a esta información, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), compartió un informe el pasado 4 de noviembre exponiendo que uno de los temas de mayor preocupación es la desaparición de personas en El Salvador: “Durante su visita, la CIDH recibió información alarmante sobre la falta de respuesta de las autoridades del Estado al alto número de denuncias de desapariciones en los últimos años”.
La visita de la comisión fue realizada en 2019 y durante su informe recalcó: “Al cierre de 2020, la FGR registró 2,151 víctimas de vulneraciones contra la libertad, es decir, 1,489 de privación de libertad y 662 de desaparición, lo que representa una disminución del 30.45% con respecto a 2019”; sin embargo, con esta cifra, las desapariciones superaron a los 1,332 homicidios que han sido registrados por las autoridades.
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En el análisis brindado por la Comisión, entre 2018 y 2019 se tenía un promedio diario de 10 personas desaparecidas a nivel nacional, retomando los datos brindados por la Fiscalía en 2018 cuando se registraron 3,289 casos de personas desaparecidas.
El informe también añade quejas interpuestas por parte de los familiares de las víctimas de desaparición en las que se recalca “El actuar de las autoridades cuando denuncian las desapariciones de sus familiares, en particular de la PNC y la Fiscalía General. (…) Los familiares también reportaron que son ellos quienes deben presentar pistas del paradero de sus familiares para que los casos no se cierren. Una madre de un joven desaparecido indicó a la CIDH: nos mandan a nosotros a buscar a nuestros hijos y no podemos porque es peligroso”.
En cuanto al incremento de las desapariciones en niñas y adolescentes Zaira Navas, representante de Cristosal señala “En el caso de las niñas desaparecidas es común que la desaparición esté precedida de violencia sexual. (...) Las adolescentes suelen ser desaparecidas por miembros de pandillas o por agresores sexuales”.
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Del 1 de enero al 20 de octubre, la Fiscalía ha recibió reportes sobre 66 menores de edad desaparecidos: 15 niños y 51 niñas, bajo la categoría de casos “activos” las autoridades acumulan otras 429 de menores de edad que fueron reportados desaparecidos entre 2013 y 2020. Uno de los datos más alarmantes es que las autoridades registran cuatro veces más casos de niñas desaparecidas que denuncias por niños o adolescentes.