Cuatro jóvenes se unen para llevar ayuda a familias sin alimentos en La Libertad

El deseo de ayudar y llevar un poco de alivio a las familias más necesitadas motiva a estos jóvenes a dar lo mejor de sí. Hace dos meses se organizaron y con la ayuda de personas altruistas ya han beneficiado a 250 hogares en pobreza extrema.

descripción de la imagen
Los jóvenes abrieron un centro de acopio para recibir las donaciones. Foto Cortesía. / Foto Por Cortesía

Por Xiomara Alfaro

2020-06-09 4:48:05

Yenin Rodríguez, Nadia Turcios, Erick García y Samuel Contreras son un grupo de jóvenes que, en medio la necesidad, llevan una luz de esperanza a familias de bajos recursos  que a raíz de las lluvias y la cuarentena por la pandemia por el COVID-19 su situación se hace más difícil.

Desde hace dos meses se han unido para recolectar víveres y enseres de primera necesidad que luego son llevados a comunidades o entregados en albergues que fueron habilitados en el país tras el paso de las tormentas Amanda y Cristóbal.

A la facha han beneficiado a unas 250 familias de varios municipios en el departamento de La Libertad. La ayuda ha llegado a cantones y comunidades como El Matazano, Tacachico, Sacacoyo, Comasagua, San Juan Villanueva y Comunidad Monteverde.

Camas, frazadas, ropa, zapatos y productos de la canasta básica es parte de la ayuda que llevan donde saben que hay una familia con necesidad extrema.

Víveres y artículos de primera necesidad llevan a familias necesitadas. Foto: Cortesía
Plástico para las lluvias es parte de los donativos en comunidades de La Libertad. Foto Cortesía

A este esfuerzo, que también integra don Alfredo García, padre de Erick, se suma el espíritu solidario de varias familias y pequeños empresarios de zonas como Santa Tecla, San Juan Opico, Quezalpeque y  La Libertad.

Ya somos varias  personas las que estamos apoyando, aunque somos cinco los que nos encargamos de la logística”, agrega Yenín, una joven emprendedora, de 33 años.

La iniciativa tomó vida hace dos meses, cuando Yenin invitó a sus contactos en redes sociales a unirse para llevar ayuda a los más necesitados. Los jóvenes señalan que decidieron pasar de ser espectadores a convertirse en una esperanza para personas que no tienen alimentos o que las lluvias les hicieron perder todo lo que tenían.

“Sabemos que tal vez no vamos  a solucionar el problema de estas personas, pero queremos darles un alivio, queremos que por lo menos tres o cuatro días estas familias no tengan que preocuparse porque no tiene que comer”, dice Samuel Contreras, de 28 años, estudiante de Marketing Digital.

  VIDEO: Grupo de amigos llevan comida a personas sin hogar, trabajadores y animales en las calles

Samuel recuerda que cuando iniciaba la cuarentena a raíz del coronavirus junto a Yenin, Nadia, Erick y don Alfredo ponían $5, $10 o lo que cada uno podía para comprar víveres y otros artículos, luego por referencia de personas conocidas hacían contacto con más familias necesitadas.

La semana pasada visitaron dos albergues en cantón El Limón y las Granadillas. Foto Cortesía

Con el paso de los días más personas se fueron dando cuenta de lo que estos jóvenes estaban haciendo, ellos empezaron a realizar otras actividades para recibir donaciones como Facebook live y abrieron un centro de acopio en la casa de Yenin.

Uno de los casos más emblemáticos que más ha marcado su buena obra es el de una pareja de ancianos residentes en Chiltiupán, no tenían víveres y necesitaban una silla de ruedas. Con el apoyo de amigos residentes en Estados Unidos les llevaron dos camas, la silla de ruedas y una canasta de alimentos valorada en $200 dólares.

Una pareja de ancianos recibe una silla de ruedas en Chiltuipán. Foto Cortesía.

La semana pasada, durante las lluvias también entregaron paquetes de plástico para proteger las viviendas valorados en $170.

 “Ya no tenemos para comer”, vendedores informales del centro de San Salvador piden ayuda tras quedarse sin sustento

Con sentimientos encontrados, Yenin también recuerda el caso de una madre soltera en  una de las comunidades que han visitado, quien vive en una condición de pobreza extrema. “La señora está embarazada y ha querido quitarse la vida ante la situación que vive, a raíz de las lluvias lo perdió todo. Hemos podido llevarle alimentos para sus hijos”, señaló.

Este martes tenían previsto visitar el cantón Las Granadillas, Santa Tecla y mañana tienen programada otra visita a una comunidad de Antiguo Cuscatlán.