La menstruación sigue siendo un tema tabú en nuestra sociedad
Aunque vivimos en pleno siglo XXI, hablar de menstruación sigue siendo un tema envuelto en mitos, vergüenza y desinformación.
El 28 de mayo se conmemoró el Día Internacional de la Higiene Menstrual, una fecha dedicada a visibilizar la importancia de la salud menstrual y romper los tabúes que aún existen en torno al tema.
La fecha fue elegida por la relación simbólica entre el ciclo menstrual promedio (28 días) y la duración típica del periodo (5 días, representado por el mes 5). La iniciativa busca generar conciencia, promover políticas públicas inclusivas y fomentar la equidad de género. Hablar abierta y respetuosamente sobre la menstruación es clave para construir sociedades más justas, donde ninguna persona se vea limitada o estigmatizada por un proceso natural del cuerpo.
Aunque vivimos en pleno siglo XXI, hablar de menstruación sigue siendo un tema envuelto en mitos, vergüenza y desinformación.
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A nivel mundial, existen más de 5.000 apodos en al menos 10 idiomas diferentes para referirse a la menstruación, lo que evidencia el tabú que aún persiste alrededor de este proceso natural
De acuerdo con un estudio de la app Clue y la IWHC, difundido por la BBC, el 78% de las personas evita nombrarla directamente. En América Latina, más del 50% también recurre a eufemismos.
Esta situación no solo invisibiliza la experiencia de millones de mujeres y adolescentes, sino que también limita sus oportunidades educativas, afecta su salud y su participación plena en la sociedad. En respuesta, cada 28 de mayo, durante la conmemoración del Día Internacional de la Higiene Menstrual, diversas organizaciones hacen un llamado urgente a promover la educación y romper los estigmas que rodean la menstruación.

En 2024, la ONG Plan International, en colaboración con la marca Kotex, alcanzó a más de 2 millones de personas en América Latina a través de campañas de sensibilización sobre hábitos de higiene menstrual. Estas iniciativas buscan cambiar la narrativa, fomentar conversaciones abiertas y reducir las barreras que impiden una salud menstrual digna.
La doctora Ana María Gutiérrez, especialista en ginecología, recalca que la menstruación no es una enfermedad y que muchas creencias populares sobre ella son falsas. “Por ejemplo, es un mito que las mujeres no pueden hacer ejercicio durante su periodo. Al contrario, la actividad física puede aliviar la inflamación y mejorar el bienestar”, explicó.
También desmintió que las adolescentes no deban usar tampones. “Este producto es seguro, siempre que se cambie regularmente y se sigan normas básicas de higiene”, agregó. Además, destacó que el dolor no debe normalizarse. “Si hay molestias o irregularidades, es fundamental acudir al médico”, subrayó.
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La salud menstrual está estrechamente ligada al bienestar hormonal, metabólico y emocional. Ciclos regulares suelen indicar un buen estado general de salud, mientras que las alteraciones pueden ser señales de alerta.

Las buenas prácticas de higiene son clave: cambiar la toalla o tampón cada cuatro horas, no exceder las ocho horas de uso, lavar la zona íntima con agua y jabón neutro, usar ropa interior de algodón y desechar los productos sanitarios de forma segura. También es esencial lavarse las manos antes y después de cada cambio.
Promover una visión informada y sin prejuicios sobre la menstruación no solo mejora la salud de las mujeres, sino que impulsa una sociedad más equitativa y consciente.

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