Altas Capacidades: Niño salvadoreño en la lista de los 30 jóvenes influyentes de la revista Forbes

Lucas Andrés Mazariego Novoa, el niño de 11 años con Altas Capacidades ha sido incluido por la revista Forbes en la lista de los 30 jóvenes más influyentes del continente.  

El listado "30 Under 30" incluye a países como México, Colombia, Perú, Chile, República Dominicana y la región de Centroamérica. 

El salvadoreño, quien a los 10 años publicó el libro "El primer gran libro de Astronomía" fue nominado en la categoría de Ciencia, Educación e Industrias Creativas.

Este listado de la revista especializada en negocios y finanzas, es una edición especial en la que se incluye a jóvenes menores de 30 años que están impactando en diferentes áreas con ideas y acciones innovadoras, disruptivas y resilientes, explica la revista en su sitio web. 

"A los ocho años comenzó a escribir su primer libro: Mi primer gran libro de Astronomía, y que fue presentado en la Feria Internacional del Libro de Guatemala 2024, logrando impacto internacional. Lucas ha sido invitado tanto a México como a Estados Unidos para presentar su obra, y ya se le considera un divulgador científico. Mazariego es parte de la Fundación Altas Capacidades", se lee en el resumen presentado por Forbes en una  publicación del 7 de julio de 2025. 

En tanto explica que los candidatos fueron evaluados según múltiples criterios, tanto cuantitativos como cualitativos, que incluyen diversos factores relacionados a las finanzas, la ciencia y la educación. 

“Estar en la lista Forbes me llena de orgullo, y siento que todo el trabajo ha valido la pena”, expresó el joven talento.

Un salvadoreño brillante que destaca a nivel internacional

A su corta edad Lucas es considerado como uno de los salvadoreños excepcionales y destaca en el extranjero donde ha tenido participaciones en foros y seminarios relacionados a la astronomía. 

Tras el lanzamiento de su libro en la XXI edición de la prestigiosa Feria del Libro de Guatemala, en septiembre del año pasado, fue invitado a presentar su trabajo en universidades de Estados Unidos. 

Lucas, quien a diario libra una difícil batalla en El Salvador ante la ausencia de programas académicos para personas con altas capacidades en el país, participa este viernes (11 de julio) en línea en un congreso internacional de astronomía dirigido a expertos adultos, organizado por una universidad estadounidense, con sede en Washington D.C.

“Nos dimos cuenta por una persona conocida, casi al final de la tarde (del jueves). Fue una sorpresa total. Nadie nos consultó, no sabíamos nada”, dice su madre Eliza Novoa, quien confiesa que "la piel se le eriza aún" al hablar sobre cómo se enteraron de que su hijo fue incluido en la prestigiosa lista de la revista Forbes.

Para ella y su familia, el reconocimiento no solo representa un motivo de orgullo, sino también un compromiso con el desarrollo del talento de Lucas,  quien sueña con llegar a ser astronauta. 

Actualmente el pequeño está escribiendo su segundo libro en el que mezcla ilustraciones de su infancia sobre fósiles y geología con sus conocimientos actuales sobre arqueología y astronomía, que es su verdadera pasión. 

Cabe destacar que Lucas ha sido admitido en el Herberger Young Scholars Academy, una centro especializado que funciona dentro de la Universidad Estatal de Arizona, Estados Unidos, la cual ofrece oportunidades educativas avanzadas acordes a las capacidades, fortalezas e intereses de jóvenes con altas capacidades, no obstante se han presentado barreras que le impiden incorporarse. 

Su madre explica que no ha podido trasladarse al país por razones migratorias. 

“El niño no puede ir solo. Necesitamos un visado que nos permita como familia estudiar, trabajar y vivir allá. Pero las oportunidades están pensadas para otros perfiles. No existe una ruta diseñada para niños como Lucas”, explica su madre.

A pesar de los obstáculos, su familia no desiste. Continúan tocando puertas para abrir camino hacia un modelo educativo que permita a Lucas desarrollar su potencial al ritmo que su inteligencia lo exige. 

“Nuestro objetivo sigue siendo llegar a una universidad de primer mundo, donde pueda avanzar según sus intereses. Su sueño es convertirse en astronauta y queremos apoyarlo”, afirma Elisa.

El reconocimiento de Forbes, que llegó sin aviso previo, ha sido una motivación para toda la familia. 

“Cuando le expliqué lo que significaba, se emocionó mucho. Nos abrazamos. Ha sido un largo esfuerzo de toda una familia detrás de un niño que sueña con destacar en la ciencia”, dice su madre.