“Yo, Ennio Morricone, he muerto”, la carta de despedida y amor del maestro italiano

El genio detrás de cientos de bandas sonoras falleció la madrugada de este 6 de julio, tras sufrir una fractura de fémur.

Morricone estaba hospitalizado en una clínica de Roma tras haber sufrido una caída en la que se fracturó el fémur.

Por Agencia EFE

2020-07-06 10:21:47

“Yo, Ennio Morricone, he muerto”. Así empieza una carta escrita por el famoso compositor italiano para despedirse de sus familiares y amigos y en la que “renueva” su amor a su esposa, Maria.

Morricone, autor de algunas de las bandas sonoras más famosas de la historia del cine, falleció en la madrugada de este lunes en la clínica romana en la que permanecía ingresado por las complicaciones surgidas tras caerse días atrás y romperse el fémur.

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Enseguida las puertas de la clínica Campus Bio Médico de la capital se llenaron de prensa y el abogado y amigo del compositor, Giorgio Assumma, salió para leer una curiosa carta de despedida de Morricone.

“Yo, Ennio Morricone, he muerto. Lo anuncio así a todos los amigos que siempre me fueron cercanos y también a esos un poco lejanos que despido con gran afecto”, empieza la misiva.

El abogado Giorgio Assumma lee la carta que dejó Morricone, fuera de la policlínica del Campus Bio-Medico donde murió el compositor y director de orquesta italiano. Foto EDH / EFE

El oscarizado compositor explica que solo hay una razón para despedirse de este modo: “no quiero molestar”.

Un recuerdo “particular” se lo dirige a Peppucio, el director Giuseppe Tornatore, para quien trabajó en todas sus películas, y a su esposa, Roberta Pacetti: “amigos fraternos muy presentes en estos últimos años de nuestra vida”, sostiene.

También cita a algunos amigos y a sus hermanas, Adriana, Maria y Franca; a sus cuatro hijos, Marco, Alessandra, Andrea y Giovanni; y a sus nietos, Francesca, Valentina, Francesco y Luca.

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Y en último pero especial lugar a su esposa, Maria Travia, con la que compartió su vida desde que se conocieran en 1950.

“A ella renuevo el amor extraordinario que nos ha mantenido juntos y que lamento abandonar. A ella es mi más doloroso adiós”, termina.

El compositor italiano y su esposa Maria, en Venecia, el 2 de septiembre de 1992. Foto EDH / EFE