Elías Axume comparte su mirada sobre la película "Luciérnagas en El Mozote"

A 44 años de la masacre de El Mozote, el cine salvadoreño suma un estreno que promete remover memorias y abrir conversación. Este 11 de diciembre de 2025 llega a las salas del país «Luciérnagas en El Mozote», un largometraje que revive, desde la mirada de un niño, uno de los episodios más dolorosos del conflicto armado salvadoreño.

La premiere, realizada este martes 9 de diciembre en Cinépolis Galerías Escalón, reunió a talentos nacionales e internacionales que dieron vida a esta historia. La película, una coproducción entre Premiere Entertainment Group y Yari Film Group, apuesta por combinar rigor histórico con una narrativa universal.

Detrás del proyecto está el cineasta salvadoreño Ernesto Melara, quien escribió y dirigió el filme. Su muerte, en marzo de 2025, impidió que presenciara el estreno, pero alcanzó a ver su obra finalizada tras 16 años de trabajo e investigación.

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“Una inmensa responsabilidad histórica y emocional”

El productor salvadoreño-americano Elías Axume, presidente y CEO de Premiere Entertainment Group, reconoce la magnitud del reto que asumió el equipo. Axume lo explica así: producir una cinta sobre la masacre de El Mozote implica una «inmensa responsabilidad histórica y emocional».

Según explica, la decisión narrativa más importante fue contar la historia desde la perspectiva de un niño de 11 años. El guion de Melara se inspira en «Las mil y una historias de Radio Venceremos» de José Ignacio López Vigil. No se basa en testimonios directos, pero sí construye una «historia compuesta de muchas historias» y toma «todo el cuidado para respetar lo que ya se ha documentado por décadas».

Talento local, elenco internacional y una apuesta por la memoria

La película reúne a actores como Paz Vega, Mena Suvari, Jeff Fahey, Juan Pablo Shuk y Yancey Arias. Aunque incorpora figuras reconocidas para llegar a audiencias fuera del país, el 95 % del filme está en español, excepto escenas que retratan cómo el mundo se dio cuenta de esta masacre. Además, se rodó íntegramente en El Salvador.

«Queríamos hacer una película de largo metraje que entretenga, pero al mismo tiempo nos eduque de un evento muy triste para que no se olvide y que no se repita», enfatizó Axume. Para él, la historia narrada desde el sufrimiento de un niño convierte este drama en una «película universal» que podría situarse en cualquier país marcado por la guerra.

El rodaje se desarrolló en apenas 25 días durante 2022, en locaciones como San Francisco Lempa, El Playón, Suchitoto y el parque Walter Thilo Deininger. Melara dedicó tres meses a la búsqueda de lugares que pudieran transformarse con fidelidad a 1981.

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Un esfuerzo masivo de producción en territorio salvadoreño

La participación del talento local fue clave. La mayor parte del elenco está conformado por actores salvadoreños, entre ellos Mateo Honles —quien interpreta al protagonista José Guevara en su infancia—, Alexis Martínez, Carlos Aylagas, Rodrigo Trigueros y Ermis Cruz. Además, habitantes de las comunidades donde se filmó participaron como extras, recreando vestuarios y ambientes propios de la época.

El rodaje movilizó a más de cien personas, un equipo actoral de 35 intérpretes y alrededor de 700 extras; una operación de producción pocas veces vista en el país.

Una historia marcada por la luz y la memoria

El título «Luciérnagas en El Mozote» proviene de uno de los relatos del libro que inspiró el guion. La trama sigue a José Guevara, un niño que sobrevive a la masacre.

El proyecto no solo representa el legado artístico de Ernesto Melara, sino también un esfuerzo respaldado por instituciones del Estado y la empresa privada. Para Axume, quien fundó Premiere Entertainment Group en 2012, esta producción también materializa un sueño personal: hacer cine de alto nivel desde El Salvador.

Al finalizar la entrevista, Axume dejó un mensaje para los artistas nacionales: «No tienen que darse por vencidos, la industria aquí está creciendo». Reconoce que abrirse paso en Hollywood no es sencillo, pero cree firmemente que con preparación y estudio, «se puede lograr».