Iglesia El Rosario, una joya arquitectónica en el corazón capitalino
La Iglesia El Rosario está diseñada como un puente, sin columnas interiores y con vitrales traídos de Francia. Este templo es una obra de arte viva.
Por
elsalvador.com
Publicado el 07 de septiembre de 2025
La Iglesia El Rosario, ubicada en el Centro Histórico de San Salvador, es una obra emblemática del arquitecto Rubén Martínez Bulnes. Construida en 1964, su diseño moderno rompió con los modelos tradicionales: sin columnas, con un techo curvo escalonado y vitrales traídos de Francia que bañan de luz el interior. El altar mayor, colocado en un muro lateral, generó controversia en su época. La estructura fue inspirada en un puente y su pared norte es considerada la más alta aislada en Centroamérica. Hoy, El Rosario es un punto clave para turistas, arquitectos y fieles que buscan arte, historia y espiritualidad.
Pocas iglesias en el mundo combinan fe, arte y audacia estructural como la Iglesia El Rosario. Ubicada en el Centro Histórico de San Salvador, este templo católico es considerado una obra maestra de la arquitectura moderna salvadoreña. Su creador, Rubén Martínez Bulnes, dejó en esta edificación su legado más visible y arriesgado.
La iglesia fue construida en 1964 en un terreno complicado, con forma rectangular, que obligó al arquitecto —entonces de apenas 30 años— a replantear por completo las normas de diseño eclesial. En lugar de una planta en cruz, diseñó una nave curva, sin columnas, con una gran bóveda de concreto que simula una escalera al cielo.
Te puede interesar: Iglesia El Calvario, historia y tradición en el corazón de San Salvador
Durante su planeación, El Rosario generó controversia tanto por su forma como por sus decisiones litúrgicas. El altar mayor no se colocó al fondo, como lo dictaban las normas tradicionales, sino en uno de los muros laterales. Esto causó incomodidad entre algunos religiosos conservadores, pero fue aprobado por el Vaticano gracias a la gestión del sacerdote Alejandro Peinador.
Otro de los elementos que provocó debate fue su monumental pared norte: una estructura imponente que, según Martínez Bulnes, es la pared aislada más alta de Centroamérica. En los años 60, había quienes aseguraban que se vendría abajo. El tiempo ha demostrado lo contrario: más de seis décadas después, sigue en pie como un símbolo de estabilidad y visión artística.
Luz, materiales reciclados y arte escultórico

El Rosario se construyó con concreto, hierro y cientos de piezas de vitrales traídos de Francia. No se utilizó madera en la estructura final, solo como soporte temporal para vaciar el concreto. Uno de los elementos más distintivos es su techo curvo y escalonado, que permite que la luz natural atraviese el templo como un arco iris en movimiento.
El interior también alberga un vía crucis forjado en hierro reciclado por el propio arquitecto. Algunas de las piezas están hechas con restos de varillas utilizadas en la construcción, integrando el proceso constructivo al arte espiritual del templo. Cada estación está fijada sobre piedra pómez y cemento, manteniendo la línea estética de austeridad y solidez.
Un dato curioso: la imagen de la Virgen del Rosario fue movida solo por Rubén Martínez. Los trabajadores se negaron a hacerlo por temor a profanar su lugar original y provocar una desgracia. Este hecho habla del respeto que inspira el espacio y del carácter simbólico que fue adquiriendo durante su construcción.
La Iglesia El Rosario no solo es un templo activo. Es también un destino cultural que atrae a turistas, fotógrafos, arquitectos y personas interesadas en la historia del arte salvadoreño. Su diseño ha sido estudiado en universidades, fotografiado en revistas internacionales y usado como ejemplo de arquitectura brutalista aplicada a espacios de culto.

Además, forma parte de un corredor cultural que podés recorrer a pie por el Centro Histórico, junto al Teatro Nacional, la Biblioteca Nacional y el museo CEDART Interactivo. En menos de dos horas podés vivir una experiencia completa que mezcla historia, tecnología, arte y espiritualidad.
Además, forma parte de un corredor cultural que podés recorrer a pie por el Centro Histórico, junto al Teatro Nacional, la Biblioteca Nacional y el museo CEDART Interactivo. En menos de dos horas podés vivir una experiencia completa que mezcla historia, tecnología, arte y espiritualidad.
La próxima vez que estés en San Salvador, no pasés de largo. Entrá a El Rosario y descubrí por qué esta iglesia es mucho más que un templo: es una revolución silenciosa hecha de luz, hierro y fe
¿Cómo visitarla?
Llegar a la Iglesia El Rosario es sencillo y seguro. Está ubicada en el corazón del Centro Histórico de San Salvador, justo frente al Parque Libertad, a pocos pasos del Teatro Nacional y la Biblioteca Nacional.
- Dirección exacta: 4ª Calle Oriente y 6ª Avenida Sur, frente al parque Libertad, en el centro histórico de la ciudad.
- Cómo llegar:
- En transporte público: Estas líneas de autobús se detienen cerca de Iglesia Del Rosario: R1, R22, R34B, R42A, R42B.
- En vehículo particular: Hay varios parqueos privados en los alrededores del Centro Histórico, especialmente cerca del Teatro Nacional y la Plaza Morazán.
TAGS: Centro histórico | El Rosario | Iglesia católica | Iglesias | San Salvador
CATEGORIA: Entretenimiento | Arte y cultura
