El estilo único de Gonzalo Vásquez, arte con raíces mayas y trazo oriental

Gonzalo Vásquez es un artista salvadoreño que ha consolidado una trayectoria de 15 años en la ilustración, muralismo y docencia, con un estilo visual que une la estética de la cultura asiática y la iconografía indígena mesoamericana. Su obra, presente en murales, cómics e ilustraciones, ha cruzado fronteras y lo ha llevado a países como México, Colombia, Estados Unidos y varias regiones de Centroamérica.

Originario de San Salvador, Vásquez descubrió su afinidad por el dibujo desde su infancia, influenciado por programas culturales en la televisión salvadoreña como “Nopo y Gonta”, y por animaciones japonesas y estadounidenses como “Mazinger”, “Heidi” y “Las Tortugas Ninja”. Además, los videojuegos despertaron en él el deseo de imaginar otros finales, lo cual lo llevó a crear cómics alternativos. Este hábito fue clave para entender que el dibujo era su forma de expandir la realidad.

Durante su adolescencia, convirtió el dibujo en su diario personal. En lugar de escribir pensamientos, los ilustraba, observando con el tiempo cómo esas imágenes se materializaban en su vida. Esta experiencia marcó su decisión de estudiar Artes Plásticas y Diseño Gráfico en la Universidad de El Salvador (UES), donde definió su camino artístico.

Su propuesta visual está influenciada también por la literatura de autores salvadoreños como Salarrué. Así, desarrolló un estilo que él mismo describe como una “fusión de estéticas” entre el trazo oriental de las caricaturas y el legado visual de los pueblos nahuablantes. Esta mezcla representa una reinterpretación contemporánea de la identidad salvadoreña.

Trayectoria, formación y legado en construcción

A sus 42 años, Gonzalo Vásquez ha trabajado como ilustrador, muralista y docente. Comparte su conocimiento en tres modalidades: desde su taller personal, a domicilio y en el Centro Cultural Universitario de la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas” (UCA). Además, fundó en 2010 el colectivo de ilustración “ARCA”, promoviendo el arte entre jóvenes creadores.

Te puede interesar:Carmina Burana se perfila como el espectáculo del año en El Salvador, así se prepara su elenco

Su carrera incluye participación en festivales muralistas, residencias artísticas en Costa Rica y El Salvador, e ilustración de libros. Sin embargo, uno de sus mayores logros fue una investigación sobre estética náhuatl que realizó en México, luego de enfrentar limitaciones en el acceso a archivos históricos en el país. Esta experiencia le permitió ampliar su perspectiva y fortalecer su estilo visual, centrado en la identidad originaria.

Pese a los avances, Vásquez reconoce los retos estructurales que enfrentan los artistas salvadoreños, como la falta de apoyo institucional y financiamiento. Hace referencia al caso histórico del pintor Carlos Imery, quien debió fundar la Escuela Nacional de Artes Gráficas ante la escasez de oportunidades a su regreso de Italia. Esta comparación refleja que, aunque han pasado décadas, el entorno artístico nacional sigue presentando desafíos similares.

Aun así, Vásquez mantiene sus metas activas. Sueña con viajar a Japón, país que ha influido profundamente en su estética, y con seguir explorando nuevas dimensiones creativas. Afirma que su carrera ha estado marcada por la curiosidad, y no descarta incursionar en formatos más íntimos del arte.

Una invitación a reconectar con la creatividad de la niñez

La obra de Gonzalo Vásquez busca estimular la imaginación y recuperar la capacidad creativa que suele disminuir con la edad. Su mensaje al espectador es una invitación a reconectar con “ese niño inquieto que llevan por dentro”. Según explica, el cerebro pierde plasticidad con el tiempo, y su arte busca conservar y revitalizar esa flexibilidad a través de la contemplación y la fantasía.

A nivel personal, se envía un mensaje de aliento a su versión infantil: “lo estamos logrando, aprovechá el tiempo”. En sus palabras, la juventud muchas veces no comprende el valor del tiempo hasta que la experiencia lo enseña, y su obra es también un recordatorio sobre la importancia de emplearlo con intención.

En la actualidad, Vásquez continúa desarrollando proyectos personales y colectivos. Se mantiene activo en la docencia y expone su obra en plataformas locales e internacionales. Actualmente, participa en la muestra colectiva “San Salvador: 500 años” en el Museo MARTE, donde se expone un tríptico inspirado en la riqueza natural del territorio salvadoreño.

Quien desee conocer más sobre su trabajo puede seguirlo en redes sociales como @sagatarah. Desde ahí, comparte avances de sus creaciones, exposiciones y reflexiones sobre el arte salvadoreño.

Con reporte de El Diario de Hoy.