Asociaciones y líderes vinculados a la lucha por los derechos de los tepesianos en los Estados Unidos celebraron el anuncio de la extensión de permisos de trabajo para los salvadoreños con TPS, pero al mismo tiempo recordaron la necesidad de seguir trabajando por alcanzar soluciones permanentes para su situación migratoria.
“Si bien acogemos con beneplácito la atención a las familias de TPS por parte del presidente Bukele, llevamos años luchando contra la cancelación racista de TPS por parte de Trump y una extensión de un año no es una solución permanente para las 400,000 familias que enfrentan amenazas de deportación”, anunció la Alianza Nacional TPS en un comunicado difundido en sus redes.
Pablo Alvarado, de la Red Nacional de Jornaleros y Jornaleras NDLON, dijo que había que reconocer el papel del presidente Nayib Bukele, pero también que ha sido parte de los resultados alcanzados por la Alianza Nacional TPS. Ambos se reunieron este mes.
Expuso que es importante que en las intenciones de la administración del presidente Donald Trump se mantiene la idea de dar una extensión solo para que la población con TPS tenga tiempo para prepararse antes de tener que regresar a sus países de origen o ser deportados.
Por ello dijo que se debe tomar la extensión como un espacio para seguir luchando y alcanzar un arreglo permanente en los Estados Unidos. “Es un paso importante. Esta postergación no se da a raíz de la litigación, sino por la abogacía del gobierno salvadoreño, por los tepesianos”.
Alvarado pidió que no se opaque la participación de la gente afectada en todo el proceso. “Sin la gente afectada esta negociación no se hubiera dado”.
En su comunicado, la Alianza Nacional TPS indicó que el litigio Ramos vs Nielsen “ha sido un salvavidas para los titulares de TPS que se encuentran en un limbo político y que luchan por una solución permanente”. Señalaron que en el anuncio no se menciona a los nacionales de los otros países afectados y que seguirán luchando en el congreso.