En 27 mil metros cuadrados de extensión la planta San Andrés de Fruit of the Loom, ubicada en American Park en Lourdes, La Libertad, las máquinas de coser marchan a todo vapor para elaborar toda una diversidad de prendas. Son productos 100% de exportación que surten los principales almacenes y tiendas de ropa deportiva de Estados Unidos y México.
Fruit of the Loom es una multinacional asentada en El Salvador hace 25 años, posee plantas de producción en al menos una decena de países de todos los continentes.
En El Salvador, comenzó con una nave industrial y poco más de 600 colaboradores. Hoy posee cuatro plantas y 9,500 empleados.
La compañía llegó a El Salvador en 1994. En cuatro años abrieron una sede por año y contrataron cerca de 1,000 empleados anuales y tuvieron un crecimiento exponencial.
“Ahora somos 9,500 colaboradores solo en El Salvador, hemos invertido en eficiencia”, contó el ingeniero Jaime Guevara, vicepresidente de Manufactura para El Salvador y México.
La planta San Andrés posee 27,000 metros cuadrados de extensión y es la más grande de las cuatro que posee la empresa en el país (las otras tres son Lamatepec, Balsamar y Joya de Cerén, también en
La Libertad).
Fruit of The Loom tiene al menos diez líneas de producción. Las más populares son las camisetas, las T-shirts, los shorts, las panties, los boxer, las camisetas manga larga, entre otras, tanto para adultos como para niños.
La mayoría de lo confeccionado tanto en San Andrés como en las otras tres plantas se envía a EE.UU. ( un 92% del total), 5% va a México y el resto, a Canadá.
En promedio la empresa produce 37 millones de docenas de prendas al año y, en 2018, creció un 7% más en relación a años anteriores. Esa, dice el ingeniero Guevara es su apuesta, mantener ese ritmo o incluso crecer aún más.
“El año pasado se mantuvo el crecimiento. Este año vamos a crecer más, eso queremos. Hemos contratado de enero a junio, cerca de 600 personas con la intención de aumentar la producción, las proyecciones de crecimiento son altas y esto obedece a la demanda de los productos y a las estrategias de la compañía para El Salvador”, detalló el ingeniero Guevara.
Según el vicepresidente de Manufactura, la tecnología de la planta es de primer nivel y para lograr su objetivo, además de ampliar la mano de obra, han adquirido nueva maquinaria que es más eficiente, hace menos ruido y es más rápida.
El presidente de la compañía explicó que han modernizado el área de inventario y en el último año han invertido más que nunca en programas de innovación y de mejora de procesos, aunque no detalló cifras.
En la región además de El Salvador, Fruit of The Loom, tiene plantas en Honduras y en México. En el caso del primer país es el proveedor de telas para los tres países, sin embargo, en cuanto a volumen de prendas, El Salvador es quien tiene la mayor producción: 37 millones de docenas de prendas de todo tipo, por año.
Presente en todo el mundo
Fruit of the Loom (su traducción podría ser Fruta del Telar) nació en 1851 cuando los hermanos Benjamin y Robert Knight compraron su primer molino y comenzaron a producir telas de algodón y textiles en Warwick, Rhode Island, Estados Unidos.
En 1871, Fruit of the Loom fue registrada como una marca comercial oficial, lo que la convierte en una de las marcas más antiguas del mundo ¡Es anterior a la invención de las bombillas, los automóviles y los teléfonos! , cita la página web de la empresa.
Hoy, 160 años después, Fruit of the Loom es un negocio global de ropa interior y ropa informal, que emplea a más de 32,400 personas en todo el mundo.
Ofrece coloridas camisetas y ropa interior que son conocidas por los consumidores en todos los rincones del mundo.
Fruit of the Loom está presente en América, Asia, Europa, Australia y África. También controla otra marca de ropa interior conocida como B.V.D. (Bradley, Voorhees, y Day). Otras marcas también fabricadas y vendidas por la compañía son Funpals / FunGals, Screen Stars y Underoos.
La lista de marcas propiedad de Fruit of the Loom incluye principalmente fabricantes de ropa, enfocados en lencería (Best Form, Curvation, Exquisite Form, Lily of France, Vanity Fair, Vassarette).
Los productos de la marca también incluyen ropa informal (Jerzees, Russell Athletic) y equipo deportivo (a través de American Athletic Inc. para gimnasia).
En el caso de El Salvador, la empresa fabrica cuatro de estas marcas y el destino principal es Estados Unidos.
Programas que transforman
La empresa apuesta a programas de Responsabilidad Social Empresarial desde 2010 y cada año invierten poco más de $76,000 dólares.
Uno de los proyectos más emblemáticos es la carrera“Yo corro con el corazón”, que realizan cada año. Más de 5,000 personas se unen al proyecto a beneficio del área pediátrica del hospital San Juan de Dios de Santa Ana.
Gracias a esta iniciativa, ya han apoyado al hospital con más de $175,000 dólares que han permitido mejorar el área pediátrica, construir dormitorios para las mamás que viven fuera de Santa Ana, entre otros beneficios. Además, la empresa que cuenta con el banco de leche materna más grande del país y está formado por colaboradoras de compañía que han donado 269 litros de leche para los recién nacidos del referido hospital.
También apadrinan cuatro escuelas ubicadas en los alrededores de La Libertad y Santa Ana y cercanas a sus plantas de producción, a las que han apoyado con mejoras en infraestructura, donación de equipo, introducción de agua potable y más.