Las aguas del lago de Coatepeque suelen volverse de color turquesa a inicios de la época lluviosa, algo que no siempre ocurre cada vez que hay lluvia; pero hoy el agua ni es turquesa ni hay época lluviosa y pese a ello el lago, de origen volcánico, ya presenta una proliferación de cianobacterias en su superficie. Esto ha llevado a que un científicos especializado en calidad del agua y humedales a recomendar a los residentes o visitantes del lago que no consuman el agua de la zona ni se bañen en el área donde se localiza el fenómeno.
Es en la zona del bajadero La Bendición, donde hay abundantes filamentos de color verde oscuro, característico de una proliferación de microalgas. Así lo concluyó el laboratorio de Toxinas Marinas de la Facultad de Ciencias Naturales y Matemática de la Universidad de El Salvador luego de analizar una muestra de agua del lugar.
Dicha muestra fue tomada por el doctor Enrique Barraza el 15 de marzo, y llevada al laboratorio el día siguiente.
El laboratorio concluyó que esa concentración de filamentos en el lago es similar a las reportadas en eventos de proliferación anteriores por lo que también recomendó no hacer inmersiones ni consumo del agua del lago.
El Diario de Hoy contactó al área de Comunicaciones del Ministerio de Medio Ambiente para obtener una posición de la Dirección de Humedales respecto a lo que ocurre en el lago. Dicha unidad respondió por escrito: “Este es un episodio típico de proliferación de cianobacterias filamentosas en el lago de Coatepeque que por su alta biomasa producida afectan la calidad del agua, produciendo mal olor y posiblemente escozor en la piel al bañarse; por lo que se insta a la población a no consumir el agua ni bañarse en ella, pues personas sensibles pueden sufrir afecciones en la piel”. Agregaron que este día harán un estudio “para caracterizar el fenómeno y dar mejores recomendaciones a la población”.
En 2018 los residentes de la zona reportaron al Marn la aparición de microalgas color café pardo en algunos puntos del lago. En ese entonces se concluyó que las algas encontradas eran distintas a las que causaron la coloración turquesa en otras épocas.
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Pero, ¿por qué razón ocurre este fenómeno de microalgas?: “Esto tiene que ver más con el cambio de tiempo, con temperaturas más calientes de la época”, explica el doctor Barraza.
Y ante el hecho del porqué no se recomiendan las actividades de baño o el consumo del agua del lago, añade: “pueden lacerar la piel y causar problemas de salud por las tóxinas o por lo difícil que son de digerir”. La muestra evaluada contiene abundante Limnoraphis cf. Birgei (antes llamada Lyngbya). Dentro de este género hay variadas especies de alga que su mayoría no son tóxicas, pero un grupo minoritario sí, explicó en 2018 Jaime Espinoza, jefe de la Unidad de Humedales del Marn. Al parecer, en Centroamérica no existe la tecnología para verificar la posible toxicidad de estas microalgas, las cuales han sido poco estudiadas.