Con total contundencia el salvadoreño Arturo Castellón, residente en Maryland, y quien competía por la nominación para buscar la alcaldía de San Miguel con el partido Nuevas Ideas, declara una y otra vez y lo clama a los cuatro vientos que el proceso de elecciones internas para los cargos de elección popular en Nuevas Ideas fue un “fraude descarado”, dadas todas las anomalías denunciadas luego de las elecciones por voto electrónico que impuso la cúpula.
Castellón valoró el trabajo realizado sobre el terreno en San Miguel con las comunidades desde hace varios años, pero también el aporte que han hecho los salvadoreños en el exterior y fundadores del partido de gobierno que ahora son burlados y anulados de cualquier incidencia en el destino del país, al dejárseles fuera por “sesgo de la cúpula”.
A pesar de que seguirá en el instituto político celeste, de no ser expulsado, Arturo Castellón, sostiene que ahora que no está atado por una candidatura, al haber quedado fuera del proceso, tiene toda la libertad de expresar su opinión y denunciar las anomalías, y que llegado el momento de votar en febrero 28 de 2021, no siente compromiso ideológico alguno y podría votar por el mejor candidato para dirigir la comuna migueleña sin importar el partido al que representa.
“Esta elección fue un fraude descarado, sinceramente, y esto que digo no tiene mayor incidencia ante un juzgado, pero ante el sistema es peligroso decirlo, hasta corro peligro de que no me vean volver a Estados Unidos, porque aquí le arman un tamal a uno rapidito; me podrían acusar de cualquier cosa y hasta sacarme en los periódicos diciendo que soy narcotraficante o cualquier otra cosa; los tamales los hacen, pero bien bonitos. ¡Para estar contra del sistema hay que tener valor!”, denuncia Arturo Castellón.
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Este empresario salvadoreño de la construcción, quien ha vivido por más de 30 años en el estado de Maryland, compitió en 2012 por la alcaldía de San Miguel con el partido ARENA, asegura que al ver el proceso interno reciente y los amaños para imponer candidatos del beneplácito de la cúpula, es claro que el sistema político salvadoreño está experimentando más de lo mismo, que tanto se ha denunciado y por lo que él se avocó al partido oficialista con esperanzas de vientos de cambio.
En la elección primaria reciente solo le adjudicaron un poco más de 800 votos, cuando su base de votantes superaba los 3 mil 700 con los que había trabajado en las comunidades de San Miguel. Como representante de los salvadoreños en el exterior, este político, dice que sus hermanos migrantes tienen que despertar y empezar exigir más y no dejarse embaucar por las cúpulas oportunistas que llegan a Estados Unidos solo para sacarse las fotos, conseguir recursos y utilizar a los salvadoreños en el exterior para su beneficio personal.
Sus declaraciones coinciden con lo que manifestara este fin de semana el salvadoreño y fundador de Nuevas Ideas en Washington DC, Luis Reyes, quien denunció en una carta abierta el sentirse estafado por el presidente Bukele “y su cherada” a la que ellos financiaron con dineros colectados con esfuerzo en diferentes ciudades de Estados Unidos para fundar el partido político que esperaban cambiara la formas de hacer política en El Salvador, pero que hoy siente que solo fueron “utilizados”.
Reyes provenía de las filas del FMLN y fue uno de los entusiastas fundadores de “Amigos de Mauricio”, en el Área de Washington, con un nutrido grupo que apoyó con igual esmero la candidatura de Funes para la presidencia de 2009 – 2014 con el primer gobierno del partido de izquierda, partido del que se separó Bukele para aspirar a la presidencia.
Arturo Castellón machaca la más reciente lección para los salvadoreños dentro y fuera del país deja ver que hay en enorme camino para trabajar y hacer cambios reales, a la luz de los resultados que emitió la formación celeste queda más que claro que “esto es más de lo mismo”.
“Los políticos son así a ellos no les conviene que el pueblo tenga un objetivo de luchar por el desarrollo de El Salvador; es más les conviene que el pueblo esté necesitado para utilizarlo; en el caso de nosotros allá la diáspora, no pedimos empleo ni trabajo, pero pedimos para nuestra gente que viven acá, y yo he venido trabajando por muchos años ya con las comunidades” comenta Castellón que cuando compitió en 2012 logró 19 mil votos de los migueleños; esta vez quedó rezagado por la dirigencia del nuevo partido bajo un sistema de escrutinio “fraudulento”, donde hubo compra de patrones, chips y otras irregularidades que han denunciado en todo el país.
Castellón dice que no tiene miedo de romper la disciplina de silencio que exige el alto mando del partido, y agrega que no hay que quedarse callado y denunciar las irregularidades, porque todos los partidos tienen gente muy buena y muy capacitada, pero también abunda la gente deshonesta que está siempre en busca de hacer maraña, como se ha visto en este proceso Por su parte, el salvadoreño Salvador Zelaya, residente en el Área Metropolitana de Washington, reconoce que la formación del partido costó a esta comunidad, no solo la logística sino los fondos que aportaron para darle forma y cumplir todos los formalismos, pero que hoy están marginados de cualquier órgano de decisión de instituto que ayudaron a crear bajo la figura de Nayib Bukele.
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