El Cuscatlán fue Monumental para el partido de la Selecta ante Estados Unidos

A estadio lleno. Los aficionados abarrotaron las gradas del "Coloso de Monserrat" para ser el jugador 12, cantaron, animaron, respetaron mucho al rival y se llevaron una calificación sobresaliente

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Foto: EFE

Por Franklin Ponce | Twitter: @_FP11

2021-09-03 5:45:53

No era un día cualquiera, la Selecta volvía a jugar una fase final de eliminatoria de Concacaf y la afición llegó al Monumental llenos de ilusión, vestidos con los colores de la bandera, azul y blanco y también de negro, el color de camiseta que ha gustado para la Selecta.

Dio la sensación que vendieron más de lo que anunciaron. Algunos sectores, las personas lo observaron de pie y otros, desde sectores que no eran permitidos, como los accesos de emergencia.

Buen empate de la Selecta ante Estados Unidos para comenzar la eliminatoria

Desde temprano en la mañana hubo bastante movimiento en los alrededores del Monumental. Por la tarde creció, mucho más a partir de las 4:00 p.m.

Entre los asistentes, habían varios que habían viajado desde el oriente y occidente del país. De igual forma, grupos que habían viajado desde Estados Unidos, Canadá y otros países. Uno de ellos fue la Familia Canales y Ventura, residentes canadienses quienes hicieron gira para apoyar a la Selecta: estaremos en los dos partidos en el Cuscatlán y ya tenemos los boletos para también estar el miércoles en Canadá. Estamos optimistas e ilusionados con este equipo", explicó uno de ellos.

La afición se fue contenta con el empate de la Selecta. Foto EDH / Jonatan Funes

A diferencia de otras ocasiones y contra otros rivales el ambiente de esta vez no fue tan hostil. Es más, a un grupo de seguidores estadounidenses les aplaudieron al ingresar, de igual forma a la Selección de este país, a quienes varios de ellos también aplaudieron.

El más perseguido, el elemento del Barcelona Sergiño Dest, quien además tuvo el detalle de sacarse algunas fotos (selfies) con aficionados que se acercaron a él.

El himno de El Salvador se gritó, mientras que el del rival, a pesar de algunos abucheos, al final lo aplaudieron.