Chapines y salvadoreños pronostican su marcador desde el Centro de San Salvador

Este martes 14 de octubre de 2025, el centro de San Salvador se volvió el escenario perfecto para medir la temperatura del partido entre El Salvador y Guatemala, que se jugará esta noche en el estadio Cuscatlán por las eliminatorias rumbo al Mundial 2026, desde las 8 p.m..

La Selecta llega obligada a ganar tras su derrota ante Panamá, y la afición ha salido a las calles con camisetas, banderas y expectativas divididas. Mientras algunos aún creen en una clasificación posible, otros simplemente disfrutan del ambiente y la pasión que despierta el fútbol.

Durante un recorrido realizado por elsalvador.com, encontramos a vendedores, turistas y aficionados que, entre comercio y comentarios futboleros, mostraron cómo este tipo de encuentros también movilizan emociones y economía.

Entre el optimismo y el desencanto: pronósticos divididos

A pocas horas del partido, las opiniones entre aficionados salvadoreños van desde el entusiasmo al escepticismo. Carlos Salinas, por ejemplo, fue directo: “Guatemala no nos gana aquí. A lo más, sacan un empate”.

Rolando López pronostica un 2-1 a favor de la Selecta. “Vamos al estadio a apoyar, aunque no siempre se den los resultados. Hay que estar en las buenas y en las malas”, dijo, luego de mencionar su frustración con el arbitraje en el juego anterior contra Panamá.

Otros, como Torres, son más críticos: “Uno ya va por el ambiente, porque en el fondo ya sabe que vamos a perder. Como ir a la feria, solo a disfrutar”. Aun así, admite que el partido genera expectativa y algo de esperanza.

Turistas chapines: fútbol, comida y buen ambiente

Desde Guatemala también llegaron decenas de aficionados. Algunos vinieron el lunes, otros este mismo martes en la madrugada. La mayoría, en grupos de amigos o familiares, aprovechando el partido para turistear y conocer otras zonas de la capital.

“Vinimos desde Quezaltenango. Son ocho horas de viaje. Nos quedamos en Santa Rosa y hoy nos venimos temprano. Solo termina el partido y nos regresamos, porque mañana hay que trabajar”, contó Jesús González, quien cree que Guatemala ganará 2-1.

Christopher, otro aficionado chapín, llegó con siete amigos y ha aprovechado el viaje para recorrer el centro. “Muy bonito todo. La gente es acogedora. La rivalidad es solo en la cancha”, expresó.

La misma impresión tuvo Cristian Chávez, quien ingresó por Las Chinamas y pasó por Santa Tecla antes de llegar a San Salvador. “Hemos visto mucha gente de Guatemala en el centro. Creo que somos más de 300, y todos con ganas de ganar. El empate no sirve”, aseguró.

Camisetas desde $5 y ventas al alza

“Desde que empezaron las eliminatorias, las ventas han subido bastante. Solo de las camisas de $5 vendemos entre 10 y 15 al día”, explicó Emerson Adolfo Ayala, vendedor de ropa deportiva que desde 2015 se instala sobre la calle Arce.

Aunque las derrotas pesan, asegura que la afición no deja de buscar la camiseta de la Selecta. “Aunque perdamos, la gente viene con ilusión. Hoy temprano ya se llevaron varias”, afirmó. Los precios varían entre $5 y $15, según el modelo y la calidad.

Emerson también reconoce que muchos turistas se acercan por camisetas: “Siempre viene gente que quiere llevarse una camisa para regalar o como recuerdo, especialmente quienes visitan el centro por primera vez”.

Wendy Sánchez, otra vendedora que lleva cinco años en la zona, también ofrece vinchas, gorras, llaveros y banderitas.

“Hoy ha estado un poco calmado, pero igual se mueve. Algunos turistas guatemaltecos también han comprado cosas del El Salvador”, comentó.

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Más que fútbol: comercio y movimiento en la ciudad

Aunque el objetivo principal es el partido, el movimiento en la zona ha generado beneficios para vendedores y comerciantes. Camisetas, banderas, recuerdos y hasta refrigerios han tenido buena demanda.

“Antes venía menos gente. Ahora, cuando hay partidos así, se ve más movimiento”, dijo Wendy, mientras atendía a un turista que le preguntaba por una vincha de Guatemala.

Y mientras el Cuscatlán se prepara para recibir a miles de aficionados, el centro sigue siendo ese lugar donde se mezclan la pasión por el fútbol, el comercio informal y las historias que giran en torno a la Selecta y a sus eternos altibajos.