Hijo de Negreira acusa al Barcelona y a su padre en el caso arbitral
Javier Enríquez, hijo de Negreira declaró que los 7,5 millones pagados por el club no fueron por sus informes. Reconoce haber cobrado 60,000 euros en total.
Por
Juan Martínez
Publicado el 18 de septiembre de 2025
Javier Enríquez Romero, hijo del exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros José María Enríquez Negreira, declaró ante la jueza que los 7,5 millones de euros que el FC Barcelona pagó a su padre entre 2001 y 2018 no fueron por los informes que él elaboró. Aseguró haber recibido solo 60.000 euros y acusó tanto al club como a su progenitor de corrupción, contradiciendo la versión de Joan Laporta. También declararon los expresidentes Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, junto a exdirectivos del Barça. La investigación busca esclarecer si esos pagos buscaban influir en decisiones arbitrales.
El caso Negreira dio un nuevo giro este 18 de septiembre con la comparecencia de Javier Enríquez Romero, hijo de José María Enríquez Negreira, exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA).
Ante la jueza Alejandra Gil, titular del juzgado de instrucción número 13 de Barcelona, Javier Enríquez aseguró que desconocía la relación económica entre su padre y el FC Barcelona. Calificó esa vinculación, ya conocida públicamente, como “poco ética”.
De acuerdo con la información publicada por medio digital El Español, en su declaración señaló que los 7,5 millones de euros que su padre recibió del Barça entre 2001 y 2018 no correspondían a los informes que él elaboraba. Afirmó que, en su caso, solo percibió 60,000 euros.
Contradicciones
Esta versión contradice la defensa del actual presidente del club, Joan Laporta, quien había argumentado que los pagos a Negreira estaban justificados por los informes preparados por el hijo.
Con su testimonio, Javier Enríquez no solo desmintió al máximo dirigente culé, sino que también acusó directamente a su progenitor y al club catalán de corrupción. La contundencia de sus palabras marca un punto clave en una investigación que lleva más de dos años en curso.

Los expresidentes frente a la jueza
Ese mismo día acudieron al juzgado dos expresidentes del FC Barcelona: Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu. Ambos confirmaron que los pagos recibidos por Javier Enríquez no guardaban relación con las cantidades percibidas por su padre.
Rosell, quien presidió la institución entre 2010 y 2014, fue especialmente polémico en sus declaraciones. Según publicó El Español, responsabilizó al Real Madrid de haber impulsado la investigación, acusándolo de “no aceptar nuestros éxitos deportivos”.
A la vez, reconoció que las sumas abonadas anualmente a Negreira le parecían bajas “para un club como el FC Barcelona”. También admitió haber tenido un conocimiento muy superficial de los informes arbitrales.
Además de Rosell y Bartomeu, también comparecieron como investigados Albert Soler, exdirector de deportes profesionales, y Òscar Grau, exdirector ejecutivo del club. En tanto, la pareja de Negreira, Ana Paula Rufas, citada también para declarar, optó por acogerse a su derecho a no responder.
Dos años y medio de investigación en caso Negreira
Las declaraciones se producen dos años y medio después de que la Fiscalía presentara una denuncia que dio origen al caso. La justicia busca determinar si los 7,5 millones de euros abonados a Negreira tuvieron como objetivo condicionar decisiones arbitrales que favorecieran al Barcelona.
Hasta la fecha, el propio José María Enríquez Negreira había sido el único de los investigados en comparecer. Fue citado en marzo del año pasado por el entonces juez a cargo, Joaquín Aguirre, quien se jubiló en enero.
Negreira se acogió a su derecho a no declarar y trató de quedar fuera de la causa alegando demencia, aunque su petición fue rechazada.
El testimonio de su hijo cambia el escenario, ya que introduce contradicciones con las defensas planteadas por la actual dirigencia azulgrana y abre la puerta a nuevas valoraciones judiciales.

El papel de los informes arbitrales
Javier Enríquez es autor de más de 600 informes realizados para el FC Barcelona. Según explicó Laporta en su momento, estos análisis buscaban perfilar a los colegiados que dirigían los encuentros del club y evaluar las decisiones arbitrales tomadas en sus partidos.
No obstante, el propio Enríquez reveló que en 2018 se enteró de la verdadera naturaleza de la relación entre su padre y la institución catalana. Aseguró que reprochó a Negreira esa vinculación, a lo que su progenitor le respondió que “no era asunto suyo”.
Tras más de una hora de declaración ante la jueza, Javier Enríquez salió del tribunal y dejó un escueto mensaje: “He esperado para hablar con quien tenía que hablar. He defendido la verdad que conozco”.
Lo que viene en el proceso del caso Negreira
El caso encara ahora la recta final de la fase de instrucción. La jueza Alejandra Gil ha citado como testigos para el próximo 12 de diciembre al propio Joan Laporta —quien no figura como imputado porque en su caso los pagos han prescrito— y a los exentrenadores del club Luis Enrique y Ernesto Valverde.
La investigación, que ha tenido repercusión internacional por la magnitud del FC Barcelona y la figura de Negreira en el arbitraje español, sigue bajo la lupa.
La justicia española deberá determinar si los millonarios pagos obedecieron a una estrategia para influir en las designaciones arbitrales o si, como defienden algunos de los involucrados, se trató de servicios profesionales de asesoría deportiva.
Por ahora, la voz de Javier Enríquez marca un antes y un después. Con su testimonio, el hijo del exvicepresidente del CTA no solo se distancia de su padre, sino que también complica la posición del club catalán en uno de los mayores escándalos deportivos de los últimos años.
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