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Amnistía Internacional nombra a Ruth López como presa de conciencia
La organización también nombró como presos de conciencia al abogado ambientalista y al líder comunitario capturados tras la protesta por el desalojo de la cooperativa El Bosque.
Amnistía Internacional, una organización que vela por los derechos humanos en el mundo, nombró a la abogada Ruth López como presa de conciencia, una categoría que le asignan a aquellas personas que han sido privadas de libertad por expresar sus opiniones de forma pacífica, o ejercer sus derechos.
La organización también nombró como presos de conciencia al abogado ambientalista Alejandro Henríquez y al líder comunitario José Ángel Pérez, quienes fueron capturados después de participar en una protesta pacífica para evitar desalojos de la Cooperativa El Bosque, en La Libertad.
? ¡Ruth, Alejandro y José Ángel han sido declarados como presos de conciencia por Amnistía Internacional! ?
— Amnistía Internacional Américas (@AmnistiaOnline) July 1, 2025
? Ruth López — abogada de Cristosal. Hoy enfrenta un proceso penal lleno de irregularidades.
? Alejandro Henríquez — abogado y defensor ambiental, arrestado tras… pic.twitter.com/GKZcCc0WJu
“Al nombrar a Ruth, Alejandro y José Ángel como personas presas de conciencia, Amnistía denuncia la represión de Nayib Bukele y expresa su solidaridad con la comunidad de personas defensoras de derechos humanos y organizaciones de la sociedad civil en El Salvador", expuso Amnistía en un comunicado.
Amnistía Internacional hizo un llamado a la comunidad internacional para que frene "este giro autoritario y exija a las autoridades salvadoreñas que pongan fin a la criminalización de quienes defienden los derechos humanos, así como a la persecución de organizaciones sociales, medios de comunicación independientes y periodistas.”
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La organización señaló que se trata de una persecución sistemática contra personas defensoras de derechos humanos. Este es un señalamiento que también ha hecho Human Rights Watch (HRW).
“Estas detenciones no son hechos aislados. Forman parte de un patrón sistemático de criminalización que busca silenciar a quienes denuncian abusos, exigen justicia y demandan transparencia en la gestión pública. El recrudecimiento de este patrón en las últimas semanas es una clara señal de alerta sobre la velocidad con la que el gobierno de Nayib Bukele está desmantelando el espacio cívico”, afirmó Agnès Callamard, Secretaria General de Amnistía Internacional.
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