Darwin Cerén: "Era de llevar a FAS a las condiciones nuestras en un calor del diablo"

El capitán de Águila, Darwin Cerén, se mostró bastante afectado y dolido por la eliminación de su equipo en cuartos de final del Clausura 2025 contra FAS en la tanda de penaltis (2-3, tras caer 0-1 en los 90' en el estadio Cuscatlán que igualó el marcador global 2-2).

El futbolista del conjunto naranja y negro criticó duramente la decisión de la junta directiva emplumada de programar el juego como local del pasado domingo en San Salvador y no en San Miguel.

"La primera cosa que afectó al grupo, obviamente, fue venir a jugar al Cuscatlán. Dos viajes seguidos para venir a jugar acá a regalar la localía pasó factura. No solo en lo futbolístico, también en la parte mental del grupo porque queríamos jugar en el Barraza. Los directivos no tomaron en cuenta a los artistas principales, que somos los jugadores. Jugando en San Miguel nos sentíamos, quizás, con más convicción de sacar este partido adelante con nuestras condiciones", declaró Cerén.

"En ninguna parte del mundo se ve que los equipos, cuando son partidos ida y vuelta, se llevan su partido a otro lado para ceder terreno. Lamentablemente tomamos una mala decisión para este partido. Venimos a jugar al Cuscatlán y el equipo tuvo que viajar incluso más que FAS. Aún así, el equipo luchó, hizo el esfuerzo y trató la manera. Tuvimos muchas oportunidades. Lastimosamente no estuvimos muy finos. Fallamos mucho y eso vino a afectar al grupo", añadió el experimentado centrocampista nacional. 

Cerén, quien no dejó de hacer hincapié en lo clave que hubiera sido jugar en tierras migueleñas, también tuvo unas palabras hacia sus compañeros que no convirtieron exitosamente el lanzamiento desde los 12 pasos ante Kevin Carabantes. Ellos fueron: los argentinos Nicolás Femia y Blas Sosa y el cuscatleco Alexander Larín.

"Al final, la manera y la actitud con la que vamos a patear un penal debe ser diferente. Tiene que ser una actitud muy determinante, convencido y muy seguro. Tal vez yo me estoy equivocando, pero vi a mis compañeros muy displicentes, cómo que no pasaba nada y muy flojos a la hora de patear (su penalti). Parte de esa responsabilidad cada uno tiene que tomarla", expresó Cerén.

"Tomás Granitto y yo no somos los buenos porque metimos el gol, pero, a lo mejor, íbamos con una actitud diferente. Benji atajó penal y no aprovechamos. Lastimosamente nos faltó esa actitud que nos diéramos cuenta de que nos jugábamos algo muy importante con un rival que ya nos había dejado antes. Era nuestro momento y lo dejamos ir, empezando por la directiva trayéndose el partido para el Cuscatlán", insistió.

"Los directivos tomaron la decisión solos (de programar en el Cuscatlán) buscando el aspecto económico para poder solventar la deuda que se tiene con el equipo. Y es entendible buscar por ese lado. Yo sé que no es entre todo malo, pero también estoy consciente que llevando esta serie a San Miguel, habíamos liquidado el primero, la gente sedienta de esa venganza contra FAS nuevamente. Iban a estar en el estadio y a llenar más de lo que vino ahora. Era meterle ese viaje a FAS hasta San Miguel, que es un viaje hostil y largo. Era de llevar a FAS a las condiciones nuestras en un calor del diablo. Todas esas cosas que puedan ayudar al equipo ahora no las hicimos. Nos enfocamos más en la manera de sacar este dinero y dejamos de lado que si avanzábamos teníamos semifinal y la oportunidad de llegar a una final más. Podía llegar ese dinero también de igual forma. Este era el paso más importante que dar y nos equivocamos en esa decisión", recalcó.

"En lo futbolístico no me puedo quejar. Tuvimos (opciones de gol). Lo único que no fuimos muy determinantes. Tuvimos muchas opciones en el segundo tiempo y no logramos concretar. No estuvimos convencidos. Le dimos vida a FAS con un gol que ni le pega bien Medrano y, al final, termina entrando (la pelota a la portería). Son pequeños detalles. ¡No puede ser que un equipo no juegue a nada, te tire un pelotazo, te complica y te anota un gol! Esas cosas te generan un malestar porque se había hecho un gran trabajo defensivamente y no podíamos aflojar. Teníamos que seguir sólidos. En la parte ofensiva sabemos que se puede errar. Van haber oportunidades que, a lo mejor, se hacen o no. Era especial tener el cero porque también con eso nos íbamos a la otra fase. El gol fue como un balde de agua fría porque era un momento donde el equipo estuvo prácticamente en el área rival", fueron otros pensamientos de Cerén en una amplia conversación con CANCHA desde el césped del "Coloso de Monserrat", tras el Clásico Nacional que dejó a FAS como ganador del boleto a semifinales para enfrentar al Municipal Limeño.

Al volver a hablar acerca del momento decisivo de los penaltis, el número 24 del Águila comentó que "no sé si es el malestar de algunos compañeros por no estar en el once titular, no jugar mucho, porque se van y si patean y no pasa nada no importa. La cosa no es así. Nos debemos a una institución grande como es Águila. La actitud no es negociable en este equipo. La actitud con la que llegamos a patear… muchos de mis compañeros dejaron mucho que desear. Es la verdad. Siento que no fueron convencidos. Fueron como si pateo y lo tapa (el portero) no pasa nada. Si fallo no pasa nada. Estaban jugando con el esfuerzo de todos los compañeros. Lo que se hizo en los 90 minutos fue un esfuerzo grande. Valía la pena terminar bien. Era un simple penal. Es llegar, patear y reventar la red. No hay misterio en eso. Por mucho que digas que el portero puede ser muy bueno si pateas a una corta distancia y reventas la red es imposible para un portero tapar un penal así. Nosotros dimos la ventaja. Ya había tapado Benji y teníamos todo el camino abierto. Les entregamos nuevamente el pase a FAS".

Para Cerén no es un consuelo el boleto a Copa Centroamericana por ser líder de la tabla acumulada de la temporada 2024/25, ya que él piensa que "era más importante ganar el campeonato porque teníamos un gran equipo. Tristemente no se logró culminar con éxito una gran campaña que el equipo traía. Nuevamente nos quedamos en el camino. Pedirle disculpas a la gente por este fracaso. Me uno a ese malestar y dolor. Desde pequeño soy aguilucho y sufro. Me pega fuerte y me da rabia. Quisiera hacer mucho más en la cancha, pero entregue lo que tenía que entregar".