Gobierno pretende conseguir $8,500 millones tras pacto con FMI

El préstamo aprobado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) de $1,400 millones, que será desembolsado a lo largo de 40 meses que dure el programa, es solo el 16.5 % del dinero que pretende conseguir el gobierno de El Salvador entre 2025 y 2028.

Eso es lo que planteó la administración de Nayib Bukele al organismo financiero en el acuerdo que firmaron en febrero de este año y que ya está en la fase de las primeras revisiones al cumplimiento de los compromisos, de los cuales depende que le entreguen los fondos.

Este pasado 5 de mayo, el gobierno debió recibir el segundo desembolso por $113 millones de parte del Fondo y el primero fue inmediatamente después de la suscripción del pacto, el pasado 26 de febrero.

DE INTERÉS: No es dinero "inyectado a la economía", es pago de la deuda con proveedores, dicen expertos

Ya se había dicho que el acuerdo con el FMI le abriría las puertas al país para catalizar el apoyo financiero de otros organismos, entre ellos el Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para obtener un paquete de financiación combinado de más de $3,500 millones durante el período del pacto.

Muestra de ello fue que casi un mes después de la firma del acuerdo, entre el BM y el BID le aprobaron más de $600 millones en créditos al gobierno salvadoreño.

Sin embargo, esas fuentes de financiamiento serían más amplias de lo que se ha dicho, pues la administración Bukele le planteó al Fondo que para lograr la "consolidación fiscal" necesita miles de millones de dólares.

"El programa de ajuste que promueve el crecimiento, con el apoyo de instituciones financieras internacionales, nos permitirá mejorar las condiciones de acceso al mercado internacional. Para respaldar nuestros esfuerzos de consolidación fiscal durante los próximos tres años y los planes de acumulación de reservas, el financiamiento externo oficial y del mercado internacional de capitales alcanzará aproximadamente $8,500 millones durante el período 2025-28", dice en el documento divulgado por el Fondo.

Ese monto incluye financiamiento del FMI, apoyo presupuestario e instrumentos relacionados que suman alrededor de $2,200 millones del BID, el Banco Mundial, el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) y la Corporación Andina de Fomento (CAF). Además contempla préstamos para proyectos de los mismos bancos de desarrollo y financiamiento del mercado internacional de capitales y de acreedores oficiales bilaterales, detalla.

"Esta estrategia de financiamiento apoyaría la sostenibilidad de la deuda, al permitir la sustitución de deuda con altos intereses por deuda más barata y con mayor vencimiento, y la acumulación de reservas suficientes para mitigar el impacto de futuros shocks fiscales", planteó el gobierno.

PUEDE LEER: El Salvador debía recibir segundo desembolso del FMI por $113 millones este 5 de mayo

Asimismo, las autoridades salvadoreñas indicaron que en el contexto de su compromiso con la implementación de la estrategia de consolidación fiscal, a la que deben someterse como parte del acuerdo, "prevemos que las condiciones de financiamiento externo para El Salvador mejoren gradualmente y nos permitan acceder de forma duradera a los mercados internacionales de capital a un costo razonable para 2027".

En ese sentido, el gobierno se comprometió a garantizar la acumulación de depósitos estatales en el Banco Central de Reserva (BCR) para crear reservas de liquidez que hagan frente a una crisis. Estas son una especie de "colchón" que tienen los bancos locales ante la necesidad de retiros masivos de los ahorrantes, las cuales disminuyeron en los últimos años, sobre todo en 2023, debido a la cantidad de préstamos internos que le han hecho al actual gobierno.

"Cualquier financiamiento neto adicional en los mercados internacionales de capital, por encima del previsto en el programa, se utilizará para acelerar la reconstrucción de las reservas fiscales y reforzar la sostenibilidad externa", dice en el documento.

De hecho, uno de los requisitos que establece el acuerdo es que haga mejoras en la transparencia fiscal y para ello se comprometió a la elaboración de una nueva Ley de Sostenibilidad y Responsabilidad Fiscal (LSRF). Esta normativa debía ser aprobada por la Asamblea Legislativa a más tardar este 9 de mayo de 2025.

Dinero para créditos al sector privado

De acuerdo al documento, el programa de financiamiento fiscal también pretende liberar recursos internos para apoyar el crédito al sector privado y normalizar la mora interna.

Ese compromiso del gobierno está relacionado con la alta deuda que ha acumulado con la banca local, pues entre más créditos le da al gobierno, menos fondos le queda a los bancos para prestar al sector privado y dinamizar la economía.

"La exposición de los bancos y fondos de pensiones nacionales al sector público, que ha aumentado en los últimos años, se reducirá gradualmente para apoyar el crédito al sector privado y el desarrollo del mercado financiero nacional", apunta el documento publicado por el FMI.

En este sentido, el gobierno planteó que con la asistencia técnica del BID, prepararán y publicarán una estrategia de deuda a mediano plazo y un plan anual de endeudamiento destinado a mitigar los riesgos de refinanciamiento y reducir los costos de financiamiento.

NO SE PIERDA:  Reservas internacionales de El Salvador crecen $261 millones en primer mes de acuerdo con FMI

"Al mismo tiempo, nos aseguraremos de que el plan para fortalecer la viabilidad financiera a largo plazo del sistema de pensiones proporcione un financiamiento adecuado para el Instituto Salvadoreño de Pensiones (ISP) y la diversificación de las carteras de activos de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP)", dice.

Los fondos de pensiones han sido otra fuente de financiamiento interna para el gobierno, ya que las AFP le prestan de los ahorros de los trabajadores, mediante la adquisición de los Certificados de Obligaciones Previsionales (COP). Esta deuda ya suma $2,301.38 millones, a marzo 2025.

Según la administración Bukele, el objetivo de obtener los miles de millones en créditos es evitar la acumulación neta de atrasos en los pagos internos.