Debido a la importante medida de higiene para evitar el contagio del coronavirus debes lavar tus manos con mayor frecuencia, sin embargo, esta acción puede resecarlas, así que para darles un aspecto renovado y sueve, acá una serie de remedios naturales y caseros para hidratarlas.
Gel de aloe vera
Este ingrediente hidratante ha servido por años como una alternativa para el cuidado de la piel, ya que tiene compuestos antibacterianos y antioxidantes. El aloe vera protegerá tus manos del desarrollo de manchas y arrugas prematuras, pero a la vez de la resequedad.
Para usarlo solo extrae la gel de las hojas del aloe y frotala en tus manos de manera suave, deja reposar por 20 minutos y enjuaga con agua tibia. Lo ideal es que realices el tratamiento por las noches.
Jugo de tomate con limón
Estos dos ingredientes naturales por separado tienen sus beneficios, pero juntos son una gran alternativa para hidratar tus manos. Extrae una cucharada de jugo de limón y dos de jugo de tomate natural.
Aplica el remedio entre dos a tres veces por semana para ver resultados rápidos; déjalo actuar por 20 minutos.
Miel
La miel siempre ha sido uno de los mejores ingredientes naturales para muchos tratamiento de belleza. Ayuda a equilibrar tu pH ya que remueve la piel puerta y otras impurezas para llevar a cabo una buena humectación.
Úsala tres veces por semana y masajea tus manos durante 10 minutos antes de enjuagar. Puedes mezclarla con avena para aportar el beneficio de regeneración celular y potenciar resultados en disminuir los signos de resequedad.
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Yema de huevo
Aunque tenga un olor poco agradable, la yema de huevo ayuda a remover las célular muertas y las bacterias, además brinda beneficios de hidratación para tus manos.
Para el tratamiento bate solo una yema y aplicala sobre tus manos secas, déjala actuar por 15 minutos y retira con jabón natural y agua tibia.
Aceite de almendra
Su rico contenido de ácidos grasos esenciales y antioxidantes hacen del aceite de almendras una excelente opción para sustituir las cremas cosméticas para manos, porque equilibra tu pH para evitar el exceso de resequedad.
Puedes usarlo todos los días por las noches, solo aplica unas gotas en tus manos, frótalas para cubrirlas por completo y haz pequeños masajes; espera unos minutos para que se absorba y enjuaga si consideras necesario.
Azúcar y aceite de recino
La combinación de estos ingredientes dan como resultado un exfoliante que remueve las células muertas, ayuda a humectar la piel y olvidarte de la resequedad.
El tratamiento consiste en mezclar una cucharada de azúcar en unas gotas de aceite de recino para conseguir una pasta que debes frotar en tus manos durante cinco minutos. Aplica dos veces por semana.