La distorsión económica que se ha generado a raíz del encierro por la pandemia desde 2020 ha hecho retroceder al país al menos 13 años en pobreza.
Así lo indican datos compartidos ayer por el Colegio de Profesionales en Ciencias Económicas (Colproce), que presentó su informe final sobre la economía salvadoreña en 2021.
Según Alfonso Goitia, vicepresidente de este colegio, en 2018 la tasa de pobreza se redujo hasta el 26% y la pobreza extrema también bajó al 6 %, pero debido a la pandemia y la crisis económica el país volvió a retornar a niveles de 2008 con tasas del 40% de pobreza y 12% de pobreza extrema.
La Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades) estimó incluso que la tasa de pobreza superará el 50 % al final del año y que el número de pobres superaría los 390,000 salvadoreños.
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El economista Goitia no se extraña de estas cifras, pues reconoce que las condiciones económicas de 2020 provocaron que más de 75,000 empleos se perdieran. A la fecha unos 2,000 empleos del sector privado aún no se han recuperado.
Además esta falta de ingresos en las familias salvadoreñas se ha combinado con un aumento en el precio de los bienes y servicios que a su vez es producto del alza en el precio de los combustibles y una distorsión en la logística internacional que ha generado una grave crisis de contenedores alrededor del mundo.
En El Salvador esta crisis ha derivado en escasez de productos y un aumento en el precio de todo tipo de artículos, desde los más básicos hasta los de temporada.
Los datos del Banco Central de Reserva a noviembre de este año muestran que el costo de la vida en El Salvador subió seis veces más en los últimos 11 meses de 2021.
Alimentos, transporte, vivienda y demás han tenido sensibles aumentos de precio en los últimos meses, lo que ha impactado en el bolsillo de los salvadoreños.
La canasta básica urbana cuesta hoy $212.5 mientras que la canasta básica rural tiene un costo de $153.
Gobierno debe buscar más inversión
Ante estas medidas, Colproce urgió al gobierno que implemente políticas adecuadas para controlar tanto el aumento en el precio de los bienes y servicios, así como propiciar acciones para atraer inversiones que generen empleo.
“Hay que hacer que el otro año haya una acción más grande del gobierno en términos de inversiones, en apoyo al sector empresarial. Tenemos que fomentar más inversiones para fomentar más crecimiento y empleo en el país”, señaló.
Goitia reiteró, además, que este trabajo debe hacerse junto con la empresa privada, pues “es muy difícil pensar que el Gobierno, por sí mismo, vaya a resolverlo”, afirmó.
Como ejemplo mencionó el Bitcoin, que pese a presentarse como una medida que ayudaría a los salvadoreños, a la fecha no ha tenido ninguna repercusión positiva.
En cuanto a las medidas para aliviar el bolsillo de las familias, Colproce propone que se puedan implementar políticas adecuadas para controlar los precios en el mercado
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“Hay productos de la canasta básica que puede ser que les puedan eliminar el IVA al menos temporalmente para no impactar tan negativamente a los consumidores”, propuso.
Las proyecciones de la Cámara de Comercio y la Asociación Salvadoreña de Agencias de Carga y Transitarios (ASAC) son que la crisis en la cadena logística, que trae como consecuencia el aumento en el precio de los productos, se mantendrá hasta 2023.
Preocupación por centralización municipal
Por su parte Balmore López, docente e investigador de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de El Salvador (UES), explicó que están preocupados por la centralización que el gobierno tiene ahora con la Dirección de Obras Municipales, pues para él uno de los mecanismos para lograr el desarrollo de las familias es potenciar las localidades.
“Si no se vuelven eficaces y eficientes en la ejecución de las carpetas técnicas de las municipalidades el desarrollo local se podría ver afectado debido a la centralización”, indicó López.
Sin embargo, el gobierno está centralizando fondos y la ejecución de proyectos a través de esta entidad recién creada que decidirá sobre los proyectos municipales.
También Colproce está preocupado por el alto endeudamiento que la administración de Nayib Bukele está acumulando sin que hasta el momento logre entendimientos con organismos como el Fondo Monetario Internacional.
Goitia aclaró que, pese a que la economía nacional ha mostrado una mejoría, ésta se debe sobre todo a un efecto rebote pues en términos reales la economía solo crecerá 0.3 %. “Estamos en un nivel bastante bajo”, señaló.
“Lo que estamos viendo es una recuperación que todavía no significa que hemos superado la crisis del año pasado y las perspectivas de un mayor desarrollo”, recalcó.