“Si algo va a matar a más de 10 millones de personas en las últimas décadas será un virus muy infeccioso, más que una guerra”, fueron las impactantes declaraciones que hizo Bill Gates, hace cinco años durante una charla Ted.
Las palabras de Gates han resonado en las últimas semanas, en las que precisamente la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19), ya mató a más de 8,000 personas y contagiado a más de 200,000 en todo el mundo desde diciembre; y por la que hasta el momento no existe una vacuna para detenerla.
El magnate dijo, en marzo de 2015, que la mayor catástrofe a la que se iba a enfrentar la humanidad no era una guerra nuclear sino a un virus.
“No misiles, sino microbios. En parte la razón es que se han invertido enormes cantidades de disuasivos nucleares, pero en cambio muy poco en sistemas para detener epidemias. No estamos preparados para la próxima epidemia”, aseveró.
Durante su charla, el empresario informático hizo referencia a la forma en la que el mundo enfrentó la propagación del ébola, asegurando que el problema no fue por el mal funcionamiento del sistema, sino porque no se tenía ningún sistema.
El millonario afirmó que no había equipos epidemiológicos, no había médicos listos a viajar para para identificar qué era la enfermedad y cómo se expandió; agregó que los informes eran en papel y que además de las demoras para subirlos a Internet, estos eran imprecisos.
Gates expuso que la falta de preparación podría hacer que la próxima epidemia fuera mucho más devastadora que la de ébola.
“Podría ser un virus con el que los transmisores no se sientan mal y puedan viajar en avión o ir al mercado, la fuente del virus podría ser una epidemia natural, como el ébola o puede venir de bioterrorismo, así son muchos los factores que podrían hacerlo peor”, dijo.
Sin embargo, Bill Gates dijo que era posible enfrentar la próxima epidemia construyendo “un sistema de respuesta bien eficaz, tenemos a favor toda la ciencia y la tecnología de las que tanto hablamos, tenemos celulares para recibir y difundir información al público, tenemos mapas satelitales para ubicar a la gente y ver cómo se moviliza”.
Agregó que los avances en biología que se tienen facilitan más el estudio de patógenos para poder fabricar drogas y vacunas que ataquen los gérmenes.
“Sí tenemos instrumentos, pero hay que ponerlos al servicio del sistema mundial general de salud”, puntualizó.
Renuncia a Microsoft
Microsoft anunció recientemente que su cofundador Bill Gates dejó su junta directiva para dedicar más tiempo a la filantropía.
Gates, de 64 años, dejó de estar involucrado en las operaciones diarias de la empresa hace más de una década, y enfocó su atención en la fundación que lanzó con su esposa, Melinda.
Se desempeñó como presidente de la junta directiva de Microsoft hasta principios de 2014 y ahora se ha retirado por completo, señaló un comunicado del gigante de la tecnología basado en Redmond, Washington.
“Ha sido un gran honor y privilegio haber trabajado y aprendido de Bill a lo largo de los años”, dijo en un comunicado Satya Nadella, director ejecutivo de Microsoft.