VIDEO: ¿Por qué China puede seguir propagando nuevos coronavirus por el mundo?

Si el gigante asiático no toma medidas para prevenir el comercio ilegal de especies, seguirán apareciendo nuevos tipos de coronavirus.

El régimen de Beijing encabezado por Xi Jinping no controla miles de mercados de animales a lo largo de toda la nación asiática. En Wuhan nació el COVID-19, pero la situación se repite en todas las provincias

Por N. Hernández / Agencias

2020-03-17 5:49:14

Los mercados de venta de animales salvajes de China están en el ojo del huracán, el COVID-19 es el segundo virus, en menos de dos décadas, cuyo brote ha tenido origen en un mercado de animales vivos situado en Wuhan.

Ahí se comercializaba todo tipo de animales vivos, el comercio de muchos de ellos es ilegal; incluso, una de las hipótesis es que algunos de los animales con los que se experimenta en el Instituto de Virología de Wuhan, donde se tratan virus como el ébola y Sars, fueron a parar al mercado y luego consumido por las personas. Dado a estas razones, el mercado y comercio ilegal de animales es objeto de escrutinio, a esto se suma la circulación de impactantes fotos que muestran cómo era el comercio de especies ilegales, una práctica que ha continuado con la vista gorda de las autoridades locales.

“El mercado típico de China tiene frutas y verduras, cortes de res, cerdo y cordero, pollos enteros desplimados (con las cabezas y picos), así como cangrejos y peces vivos, quew arrojan agua de las peceras motorizadas. Algunos mercados venden cosas más inusuales, como serpientes vivas, tortugas y cigarras, cuyos, ratas de bambú, tejones, erizos, nutrias, civetas de las palmeras e incluso lobeznos”, escribió Giulia Marchi, periodista del diario The New York Times.

“Los mercados son característicos de varias ciudades chinas y ahora, al menos por segunda vez en dos décadas, han sido la fuente de una epidemia que ha diseminado el miedo, agobiado a la burocracia del Partido Comunista y expueto los riesgos epidemiológicos que pueden surgir en lugares donde convergen los humanos y la fauna silvestre”, agregó la periodista.

El texto lo publicó el 27 de enero cuando el mundo aún no estaba preocupado por el mortal coronavirus COVID-19 y todavía no era considerado una pandemia. Sin embargo, Gao Fu, director del Centro Nacional de Control y de Prevención de Enfermedades ya había admitido que en el mercado de Wuhan habían ventas ilegales de animales.

El comercio que se da en mercados como el de Wuhan hace que los humanos cada vez más tengan un contacto más estrecho con los virus que portan los animales y que pueda propagarse rápidamente, según explicó Peter Daszak, presidente de EcoHealth Alliance, organización no gubernamental especializada en la prevención de enfermedades infecciosas.

Por el momento el comercio de animales salvajes está prohibido de forma temporal, pero hay muchas especies que se consumen ampliamente en el gigante asiático y otros países del continente por ser considerados un manjar o con beneficios para la salud.

Pero todo esto, conlleva un riesgo para la salud humana, según Christian Walzer, director ejecutivo del Programa de Salud de la Sociedad para la Conservación de la Vida Silvestre, con sede en Estados Unidos.

Por ejemplo, se cree que los murciélagos engendraron el SARS (siglas en inglés del Síndrome Respiratorio Agudo Severo) entre 2002 y 2003 y que mató a cientos de personas en Asia, sobre todo en China.

También un estudio publicado el martes en la revista China Life Sciences y patrocinado por la Academia China de Ciencias de Beijing analizó las relaciones entre la nueva cepa y otros virus según los primeros análisis este coronavirus podría haberse originado en murciélagos o serpientes.

Un estudio, publicado el martes en la revista China Life Sciences, patrocinado por la Academia China de Ciencias de Beijing, analizó las relaciones entre la nueva cepa y otros virus. Esto según un análisis genético del patógeno que hasta ahora ha provocado la muerte de 17 personas.

Las teorías se basan en el examen de la secuencia del genoma del virus, liberado por las autoridades a raíz del brote, y dos estudios señalan el papel probable de los murciélagos en el brote. Pero el régimen chino parece no hacer nada para poner un freno a este tipo de mercados descontrolados. Desde el germen del brote en noviembre pasado, sólo atinó a cerrar el centro donde se originó el mal. Pero ninguna medida fue tomada para erradicarlos. ¿Espera Xi Jinping el nacimiento de un nuevo virus.

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