"No debemos obligar a los adultos mayores a vacunarse, sino darles más información": gerontóloga Sandra Corado

Si usted tiene una persona de tercera edad en su casa, le interesa leer este artículo, con consejos y recomendaciones sobre el fármaco anticovid. 

Las formas de tener una cita para vacunación son a través de página web vacunacioncovid19.gob.sv y llamando al número 132.

Por Carlos López Vides

2021-04-06 10:25:13

El Gobierno ya comenzó a llamar a personas de la tercera edad en el país, así como a las que tienen enfermedades crónicas degenerativas, para darles una cita con hora, fecha y lugar, y que así puedan recibir la vacuna contra el COVID-19. La vacunación de esta población inició el 5 de abril.

También se puede llamar al 132, el cual ha mostrado saturación y servicio deficiente, pero muchos ciudadanos sí han podido concretar cita para la vacunación.

Para conversar sobre el panorama de la población arriba de 60 años hacia estas aplicaciones de fármacos, El Diario de Hoy entrevistó a la doctora Sara Corado, gerontóloga clínica, quien inició aclarando que las familias o encargados del adulto mayor jamás deben forzarle a que se vacune.

TE PUEDE INTERESAR: Este es el sitio web habilitado para agendar el día de vacunación contra el COVID-19

“Los adultos mayores son eso, adultos. Hay ciertas patologías, como las demencias avanzadas, que pueden hacerlos bien dependientes de una tercera persona, ya sea de sus hijos, familia o un cuidador en particular, y nos hace confundirnos en cuanto a que son como niños, que no les corresponde la responsabilidad al 100%, y que tenemos que hacerles que hagan lo que nosotros decimos”, explicó la especialista.

Muchas personas a esta edad mantienen un alto grado de autonomía, toman sus propias decisiones y “son muy independientes. Si ellos deciden no vacunarse, es bien difícil obligarlos y decirles ‘se vacuna porque sí’”, remarcó la doctora.

¿Qué hacer, entonces? “Informarles”, responde la profesional. “Hacerles ver que la vacunación es algo ventajoso. Hay muchos adultos mayores que están animados, incluso a la espera de ser vacunados; y hay otros que ya tomaron la decisión de no hacerlo, porque les da miedo a los efectos a las que se puedan enfrentar”.

Para disminuir este temor, la doctora recomienda ocupar “algún material didáctico que con ellos funciona muy bien, carteles o dibujos ilustrativos de cómo va el proceso de la vacuna, que en realidad no es dolorosa como algunas personas lo dicen”.

Otra solución es que la familia le recopile al adulto mayor los datos correctos y verificados sobre las vacunas, para evitar que se contaminen con la ola de desinformación que hay alrededor de estos fármacos.

En ese sentido, la doctora Corado lamentó que no ha existido una campaña del Gobierno para hablarle en específico a esta población sobre la vacuna.

TE PUEDE INTERESAR: Médicos temen deficiente organización logística en megacentro de vacunación contra COVID-19

“En cuanto a la información que se le está dando al adulto mayor sobre la vacuna, es nula. Sí salen dando declaraciones que la vacuna es segura, pero en cuanto a dirigirse a la población adulta mayor en específico, y buscar estrategias audiovisuales que les llamen la atención... nada. Pero a nivel de TV, periódicos, radio o los medios que ellos tienen accesibles, porque el adulto mayor a veces no tiene internet, pues no hay nada, no hay información dirigida al adulto mayor para poder convencerle que se vacune”, señaló la especialista.

También el Gobierno podría echar mano del primer nivel de atención médica, enraizado en las colonias, barrios y caseríos del país, donde hay clubes de adultos mayores en las comunidades. Ahí, a juicio de la médica, podrían organizarse pequeñas reuniones informativas, para despejar dudas.

Velocidad vs. calidad

El Gobierno ha anunciado que organizará un megacentro de vacunación, donde planea atender a 10,000 personas al día. Para la doctora Corado, esta estrategia pasa por alto la necesidad de hacer un chequeo previo a cada adulto mayor antes de ser vacunado.

“A las personas que han vacunado al momento, solo son tres o cuatro preguntitas que les hacen, le toman la temperatura, la presión y se acabó, ya les ponen la vacuna. Tendría que ser más profunda la revisión física y la entrevista, porque el ser adulto mayor no es contraindicación para la vacuna, pero hay ciertas cosas que la persona tiene que tener bien claras para ser vacunada”, alertó la especialista.

Como ejemplo, la doctora Corado explicó que “puede haber un adulto mayor que tuvo un ingreso por choque anafiláctico (reacción alérgica) por una vacuna o medicina equis, y no lo va a decir e igual lo van a vacunar. Eso es una contraindicación, porque no se puede vacunar a una persona que tuvo un choque anafiláctico en el pasado. Y quizá las personas adultas mayores no lo van a decir, por miedo o por pena”.

Que esto pase es evitable, insiste la gerontóloga.

“Ese tipo de error no es porque la vacuna sea mala, es porque la entrevista previa que se les hace no es la correcta, ni la evaluación clínica tampoco; y no es porque no puedan, es porque quieren vacunar, vacunar y vacunar... entonces el tiempo es valioso y hacen chequeos breves, que son las que van dando los errores”, argumentó, y dijo que como consecuencia “el paciente va a tener una mala experiencia, va a tener efectos secundarios, y después le va a ir a divulgar a sus vecinos adultos mayores, que van a agarrar miedo y ya no van a querer ir”.

Hacer estos chequeos a fondo será “inviable” al ritmo que el Ministerio de Salud desea vacunar, aceptó la profesional, pero insistió que “el Gobierno se va a ir con base en números, vacunar tantos por días, sin importar lo específico, y el adulto mayor es un grupo bien delicado y diverso. No todos arriba de 60 años es lo mismo, y no, cada uno tiene sus propias características. Hay muchas cosas de sus enfermedades que ellos conocen muy bien, pero si usted no se los pregunta, no se lo van a decir”.

TE PUEDE INTERESAR: Estudiantes con temperatura arriba de 37.5 grados no podrán entrar a los centros educativos